El juicio por la desaparición de Marta Calvo continúa. Hoy es la undécima jornada, donde la madre de la joven desaparecida ha declarado. Marisol Burón se ha emocionado al contar al jurado como vivió la desaparición de su hija en noviembre de 2019 y cómo se siente. «Llamaron y me dijeron que habían descuartizado a mi hija. ¿Por qué? Eso una madre no lo tiene que oír», comenta.
Burón ha explicado que la noche de la desaparición de su hija ejerció la prostitución para abrir un centro de belleza juntas. La víctima le mandó un mensaje y le comentó que estaba con un cliente en Manuel. «Me dijo que no me preocupara», ha afirmado la madre, quien ha asegurado que mantenía una relación y una comunicación «muy intensa y diaria» con Marta.
Al día siguiente, cuando se despertó, le mandó varios mensajes a su hija pero no le contestaba. Tampoco cogía el móvil. «Era raro pero pensé que estaría durmiendo», ha narrado. El día de su desaparición, Marta le había enviado la ubicación a su madre. Por eso, al no recibir respuesta, el viernes 8 de noviembre Marisol acudió al lugar que le había enviado su hija: la casa de Ignacio Palma.
«Este señor me abrió la puerta. Me aseguró con toda la serenidad del mundo que no conocía a Marta«, narra Burón. «Me dijo que si no me creía que no estaba que podía entrar y verlo pero le contesté que no, que me fiaba de él», ha explicado. A esto último ha añadido arrepentida: «Tengo esa pena de decir por qué no pasé porque igual mi hija estaba todavía dentro. Si hubiese entrado igual mi hija estaba aún ahí».
«ME HA ROBADO A MI HIJA Y ME ESTÁ ROBANDO EL DUELO»
El domingo Burón acudió a la Policía a anunciar la desaparición. Al volver a casa tenía la esperanza de poder ponerse en contacto con su hija, pero no fue así. Ante la falta de noticias de Marta, Marisol regresó a la vivienda del acusado pero «en la casa ya no me abría nadie». Aun así, consiguió el teléfono de los dueños, quienes le comentaron que la vivienda estaba alquilada a una mujer.
A los 21 días de su desaparición me llamaron para decirme que un señor había acudido al cuartel diciendo que era él a quién buscaban. «Ese fue el peor día de mi vida», ha afirmado. «Es muy fuerte que te digan que este señor se encontró muerta a mi hija y que la descuartizó. Eso una madre no lo tendría que oír. ¿Por qué ella? Mi hija era incapaz de hacer daño a nadie».
Finalmente, Burón ha terminado con unas duras declaraciones: «A fecha de hoy no tengo a mi hija. ¿Por qué no tengo a mi hija? ¿Por qué no dice dónde está? Solo quiero recuperarla. Ya no me la va a devolver nadie con vida. Me ha robado a mi hija y me está robando mi duelo. No puedo vivir así. Esto es la muerte lenta para una madre«.
EL PAPEL DE LA POLICÍA EN LA BÚSQUEDA DE MARTA
Marisol Burón también ha declarado cómo fue su experiencia poniendo la denuncia de desaparición de su hija. «El policía me dijo que mi hija, siendo lo que era, igual estaba en Palma o Ibiza y venía con 20.000 euros», explica. «Al final me puso de mala gana una denuncia que tenía siete líneas y porque le insistí».
Días más tarde acudió a otra comisaría. Allí, le comentaron que el caso lo llevaba la Guardia Civil de Villanueva de Castellón. Sin embargo, estos le confesaron que no sabían nada de ninguna desaparición. «Le di el nombre y apellidos y me dijo que iba a abrir el correo. El nombre de mi hija estaba ahí y no habían hecho nada, aún no habían intentado buscar a mi hija«, ha lamentado.
DOS AÑOS DE LA DESAPARICIÓN DE MARTA CALVO
Fue en noviembre de 2019 cuando se alertó de la desaparición de Marta Calvo en Manuel. Ignacio Palma declaró haber mantenido relaciones sexuales con la joven quien supuestamente murió por consumo de cocaína durante el coito. El acusado habría introducido la droga vía genital, al igual que con las otras víctimas. Posteriormente, el presunto asesino descuartizó el cuerpo y distribuyó sus restos por diferentes contenedores.
Durante meses, la Guardia Civil estuvo rastreando los vertederos de la zona sin obtener ningún rastro. El pasado mes de septiembre se realizó un estudio exhaustivo de la geolocalización del móvil de Palma. En esta investigación se detectó que había estado varias horas después del crimen en las afueras de Manuel, una información que omitió en su declaración oficial.
Actualmente, los restos mortales de Marta Calvo aún no se han hallado pese a las continuas búsquedas que ha realizado la Guardia Civil por las zonas del interior de Valencia.