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Entrada de un centro hospitalario de la Junata de Castilla y León. / Foto: EFE.

Ya son más de 18.000 personas las que han muerto por coronavirus en España. Las calles siguen vacías, los hospitales llenos -aunque con menos afluencia que las primeras semanas de cuarentena- y la gente continúa en sus casas. Pero el Covid-19 no es la única enfermedad que se está cobrando vidas en nuestro país.

Según los cardiólogos, puede que la gente a la que le haya dado un infarto no vaya al médico por miedo a contagiarse. Julián Pérez, presidente de la Asociación de Cardiología Intervencionista de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), indica que «no hay ningún motivo por el cual los pacientes tengan menor número de infartos». Por eso apunta que, como en otros países, la causa puede ser el miedo a contagiarse.

Oriol Rodríguez Leor, miembro de la SEC, también va por el mismo camino. Cree que la reducción de casos de infarto en el hospital «no responde a una realidad epidemiológica, sino al miedo al coronavirus«. Ante esta posibilidad, se ha llevado a cabo un estudio con hospitales pertenecientes a la red de código de infarto de España.

La SEC indica que se espera «un incremento en la mortalidad por infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST». En 2018, estas intervenciones fueron más de 21.000 en toda España. Sin embargo, los expertos creen que en cuarentena habrá pacientes que presenten muerte súbita extrahospitalaria.

Qué dice el estudio

De esta manera, se ha realizado una encuesta telemática a 71 servicios de cardiología de toda España. En el sondeo se ha visto que entre el 24 de febrero (semana en la que el coronavirus acababa de llegar a la península) y el 22 de marzo (ya declarado el estado de alarma) los procedimientos estructurales se han reducido un 48 %. Además, ha habido un 40 % menos de angioplastias primarias realizadas en infartos agudos de miocardio.

Como ha señalado Rodríguez, «ese 48% menos en procedimientos estructurales está muy relacionado con la caída de diagnósticos». Pero también tiene que ver con que los que no tienen síntomas severos aguantan más en casa.

Otra de las enfermedades que señala el informe es la trombolisis. Este tratamiento ha incrementado levemente. «Cuando el paciente espera y consulta mucho más tarde se plantea esta opción de los fármacos», afirma Rodríguez. Esto se da por la saturación de los hospitales. Como el traslado en las circunstancias actuales es más complicado, se opta por este fármaco. No obstante, el experto señala que «su uso es casi anecdótico».