Jack es un caniche toy que desapareció en la madrugada del 16 de abril en un paseo por el Mareny Blau, en Sueca. En un momento dado el can salió corriendo y sus propietarios no pudieron seguirlo y acabaron perdiendo a su mascota. Se trata de una raza bastante cotizada y sus dueños temen que pueda ser vendido.

El caniche tiene dos años, es de color crema, tiene los ojos más claros de lo habitual para este tipo de perros. Sus dueños ofrecen una recompensa de mil euros para conseguir dar con Jack. Su foto está por todas partes, carteles en las paredes, en redes sociales, en bares y tiendas.

Varias personas hicieron una batida por la zona al día siguiente por si pudiera estar escondida entre matorrales del campo. Elena, su dueña, ha llenado de carteles de búsqueda las calles de la zona costera. Según publica Las Provincias, ha sido visto por el Mareny de Barraquetes.

El mismo diario informa que varias personas afirmaron que vieron al caniche cerca del horno Beata Inés, en un barrandero de Cullera. Hicieron una batida por la zona sin obtener resultados. Piden que se abstengan de llamarles personas que quieran aprovecharse de la situación, dando pistas falsas y poco fiables.