Zaplana en una imagen de archivo

Unos nuevos audios sobre el caso Erial podrían dar un giro en el juicio al expresidente de la Generalitat Valenciana y exministro de Trabajo, Eduardo Zaplana. El diario digital The Objective ha publicado en exclusiva una grabación en la que se escucha a altos mandos policiales discutir sobre la posibilidad de investigar al político popular por un supuesto cohecho, pese a que el entonces jefe de a Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), José Luis Olivera, admitió no disponer de evidencias.

Las grabaciones corresponden a una reunión que tuvo lugar el 12 de abril de 2011, es decir, cuatro años antes de iniciarse la investigación del caso Erial. Según el diario, en la comida estuvo presente el propio Olivera junto con el comisario José Manuel Villarejo, quien recientemente recalcaba la idea de una cacería política contra Zaplana motivada desde el propio Partido Popular; el exdirector general de la Policía Nacional, Juan Cotino, entonces también vicepresidente tercero de la Generalitat; y el exdirector Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Nacional, Pedro Díaz-Pintado.

LA ANÉCDOTA POR LA QUE TRATARON DE ACUSAR A ZAPLANA DE COHECHO

En la conversación, Juan Cotino narra una anécdota sucedida diez años atrás, en 2001, cuando Zaplana se encontraba en un yate y estaba siendo fotografiado desde un vehículo. El entonces jefe del Consell, llamó al comisario Segundo Martínez, entonces jefe Superior de Policía en Valencia, para que indagase quién estaba detrás de esas fotografías.

«Un día estando Segundo en Valencia, Zaplana le llamó a Segundo, un domingo o un día de fiestas. Me lo contó Segundo a mí. El tema es que estando en el yate había un tío, escondiendo en un coche, haciendo fotografías. Entonces, el tema es que alguien tomó la matrícula del coche e hicieron un seguimiento y era de un periodista de El Levante o El País. Y, entonces Segundo fue a Zaplana a contarle la película, a venderle la moto», relata Cotino en el audio publicado por The Objective.

Durante la explicación de Juan Cotino, el exjefe de UDEF interviene para destacar que el delito que podría servir para la apertura de una investigación es el cohecho por el yate prestado. Sin embargo, también aclara que él mismo ya lo había investigado sin encontrar evidencias al respecto. «Se le puede imputar, porque el delito clave para el juez, para taparse el culo, es el cohecho. Si yo no demuestro el cohecho, no hay… Entonces, he anticipado que cohecho en principio no hay. Pero tenemos unas serias dudas y las tenemos que aclarar».

VILLAREJO SEÑALA A COTINO Y RAJOY COMO LÍDERES DE LA CACERÍA CONTRA ZAPLANA

Por otra parte, existe otro audio que corroboraría la versión de Eduardo Zaplana en el juicio en la que sostiene que nunca habría hablado con Cotino sobre las adjudicaciones de las ITV puesto que no mantenían una buena relación, llegando incluso a ser una enemistad.

En el audio se escucha al propio Cotino hablando con Villarejo pidiéndole información que pudiese comprometer a Zaplana para ir a por él. «En el caso de que le llegue algún mensaje con el que podamos tocárselos a Zaplana…», comenta. Esta frase pone en relieve la escasa probabilidad de que los dos políticos compartiesen negocios.

El comisario José Manuel Villarejo. / MANUEL BRUQUE (EFE)

Además, estos audios irían en la línea de lo defendido por Villarejo el pasado jueves cuando señaló en su declaración como testigo a Cotino y al expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de liderar una cacería policial contra Zaplana porque «pensaban que podía disputarle el liderazgo».

«Lamentablemente esa es la impresión que yo tuve a partir de 2010-2011, a punto de entrar en el Gobierno el Partido Popular. Como he dicho en la sala, el señor Cotino me decía que Rajoy estaba obsesionado con él porque pensaba que podía boicotearle el liderazgo«, relataba Villarejo ante las cámaras.

BENAVENT VE «IMPENSABLE» QUE LOS PAPELES DEL SIRIO ESTUVIESEN EN EL ALTILLO

El excomisario desveló que había rumores de investigar si Eduardo Zaplana disponía de dinero fuera de España y que el propio Corbín le dijo que «no había más remedio que buscar cosas». «Yo le respondía que eso era un error, porque cargarse a un político… Corbín me dijo que fue un acto provocado para generar la investigación«.

Marcos Benavent a su llegada a la Ciudad de la Justicia. / MANUEL BRUQUE (EFE)

Cabe recordar que el caso Erial tiene su origen en unos papeles que aparecieron en un piso del centro de Valencia. El empresario sirio Imad Ahmad Al Naddaf se trasladó a una vivienda que había estado previamente alquilada por Zaplana y durante la reforma localizó varios documentos, supuestamente comprometedores, ubicados en un falso techo.

El empresario acudió al entonces vicesecretario del PP de Valencia, Marcos Benavent, para entregarle la documentación. El autodenominado ‘yonqui del dinero’ también testificó el pasado jueves asegurando que tras los papeles del sirio hay «alguien que quiere perjudicar al PP». Asimismo, recalcó que era «impensable» que todos los documentos que se encontrasen ocultos en un altillo debido a su gran volumen.