València ha amanecido estos días con un nuevo misterio urbano. En distintos puntos de la ciudad han aparecido enormes cascos de moto, réplicas a gran escala de los que usan los pilotos de MotoGP en plena competición.
Estas piezas, de 2,5 metros de altura, 350 kilos de peso y 15 metros cúbicos de volumen, forman parte de una acción promocional del Gran Premio Motul de la Comunitat Valenciana. Será la última cita del Mundial de Moto GP, que se celebrará a mediados de noviembre en el Circuit Ricardo Tormo de Cheste.
Lejos de ser simples decoraciones, los cascos son auténticas esculturas urbanas que combinan arte, ingeniería y promoción deportiva. Cada uno luce un diseño único, inspirado en la estética vibrante del motociclismo y en la precisión técnica de los cascos reales.
Dónde encontrar los cascos
La ciudad se ha convertido en una especie de circuito artístico con varias “paradas” repartidas por sus puntos más emblemáticos:
Ciudad de las Artes y las Ciencias
Frente a las Torres de Serranos
Calle Marqués de Sotelo (entre la Estación del Norte y la plaza del Ayuntamiento)
Puente de la Exposición, en la Alameda
Próximamente, un quinto casco en la plaza Doctor Collado de Cheste
Cada estructura descansa sobre una base que anuncia el Gran Premio de la Comunitat Valenciana. De tal manera que invita a locales y visitantes a fotografiarse junto a ellas y compartir la experiencia en redes sociales.
La iniciativa ha sido ideada por la agencia KIDS y producida por Valúa. Dos firmas valencianas que han sabido unir creatividad y pasión por el motor para acercar la emoción de MotoGP a la calle.
Las esculturas permanecerán expuestas hasta el fin de semana del Gran Premio, cuando se trasladarán al Circuit Ricardo Tormo. Así se completará un recorrido que une arte, ciudad y velocidad.














