Gea

Blogueros, instagramers o youtubers, todos ellos forman parte de unas profesiones nuevas y en auge debido al éxito de las redes sociales en los últimos años. Desde 7 Televalencia hemos querido conocer en qué consiste ser un influencer y cómo es el proceso de trabajo al que se someten día a día para dar a sus seguidores lo que quieren ver. Macarena Gea, una de las figuras pioneras en las redes sociales a nivel nacional, nos abre las puertas de su estudio en el centro de Valencia para desvelarnos cómo fueron sus inicios y contarnos cómo está siendo la experiencia en el mundo digital.

1. Arquitecta, interiorista, organizadora de eventos, wedding planner, blogger y ahora también escritora. Pero empecemos por el principio, ¿cómo comenzó a gestarse la influencer que hoy conocemos, Macarena Gea?

Todo arrancó cuando estaba estudiando la carrera, los últimos años de arquitectura eran estresantes y para relajarme confeccionaba complementos. De tanto estrés me junté con una cantidad tan grande que debía darle salida de algún modo y creé el blog para llegar a la máxima gente posible y venderlos. Una vez finalicé la carrera y me puse a trabajar abandoné las ventas. Sin embargo, el blog me gustaba mucho por la interacción que tenía con los lectores por lo que decidí usar el espacio destinado hasta entonces a los complementos para llenarlo con otros temas que me gustaban.

2. A día de hoy son más de 187.000 personas las que te siguen a través de Instagram, ¿en qué punto viste que el blog ya era una forma de vida?

En realidad pasó bastante tiempo hasta que el blog empezó a dar dinero de por sí. Cuando comencé a principio de 2007 los blogs eran auténticos desconocidos y ninguno de los que estábamos entonces pensábamos que podía ser un negocio.

Poco a poco fueron llegando algunas marcas que se interesaban en realizar determinados contenidos publicitarios pero nunca me lo planteé como un negocio en sí mismo sino como un complemento, para captar un público que luego se deriva a mis otros “trabajos reales”, los del mundo 1.0. El blog ha sido una manera de generar clientes en una época en la que no era fácil establecerse como empresario.

3. Hace ya 10 años que arrancó el blog por lo que se podría decir que eres toda una pionera de la era digital, ¿cómo consideras que han ido cambiando las redes sociales?

La interacción con las personas ha cambiado totalmente, cuando empecé sólo estaba Facebook y ni si quiera lo usaba todo el mundo como ahora. Era la época de Messenger por lo que la comunicación se basaba generalmente en los comentarios de las lectoras en el blog.

Una vez llegaron las redes sociales la conversación se trasladó a ellas y su nacimiento implicó además una exposición mayor de la vida de mucha gente. En mi caso particular, por un lado me gusta compartir detalles de mi día a día con las lectoras pero siempre guardando una parcela de privacidad para no contar mi vida entera y separar lo personal de lo profesional.

4. Ser influencer supone trabajar incluso en vacaciones subiendo fotos, recomendando sitios, etc. ¿Dónde está el límite para desconectar la vida privada de las redes sociales?

Yo considero que cada uno tiene que marcar el límite en el que se sienta cómodo. Hay gente a la que le gusta compartir mucho más de su vida y, por el contrario, hay quienes usan las redes de manera exclusivamente profesional. Todo ello está bien, cada uno tiene que marcar en qué punto se siente cómodo aunque la mayoría de los influencers nos situamos entre los dos extremos.

5. Al exponerse en redes sociales se corre el riesgo de enfrentarse a comentarios fuera de tono.

Por la calle es impensable que alguien se meta contigo pero en las redes sociales sí sucede y al principio esos comentarios negativos te dejan en shock pero afortunadamente es un porcentaje ínfimo de la gente que comenta. Hace tiempo decidí que el blog y las redes sociales eran algo positivo, yo intento contar lo que me gusta y lo que genera mal rollo lo aparto.

6. El tema de la fotografía es vital si se quiere ser toda una influencer, siempre parecen fotos naturales e improvisadas pero imagino que detrás hay un trabajo de preparación y un buen fotógrafo que te acompaña…

En mi caso el que hace las fotos de mis looks es mi marido por lo que es bastante fácil gestionarnos y en cuanto a la fotografía de producto me encargo yo personalmente. Así es sencillo, si tuviese que recurrir a un fotógrafo profesional con el caos de los niños y el trabajo no sabría cuándo preparar los looks pero siendo nosotros la organización nos funciona mejor.

Por otro lado, efectivamente siempre son fotografías planeadas, hay alguna improvisada pero por norma general no. Me tomo mi tiempo para trabajar el estilismo de las fotografías, realizar las composiciones, elegir la luz adecuada, seleccionar el atrezzo según el producto que quiero enseñar… Pero aunque no haya improvisación no significa que lo contado no sea la real.

7. Como comentábamos hace un momento ahora también eres escritora, háblanos un poco de “Mi guía de estilo”.

El libro se publicó en septiembre con Planeta aunque fue hace casi dos años cuando comenzamos a prepararlo, yo no encontraba tiempo para rematarlo y en mi último embarazo acordé terminarlo antes de la llegada de los niños. Estoy muy contenta con él, ha funcionado fenomenal y el feedback de las lectoras es buenísimo.

Básicamente lo que se puede encontrar en él son pequeñas pautas con consejos para hacer el día a día más bonito y ser más feliz. Es un libro muy práctico con herramientas clave para diferentes temas, si por ejemplo se quiere dar un giro a la decoración de la casa explico el saber por dónde empezar, a dónde acudir… También es un libro aspiracional, con fotografías, donde cuento cosas prácticas que las lectoras puedan llevarse a su terreno para incorporarlo en sus vidas siempre que lo necesiten.

Macarena Gea desvetla com és ser una influencer d’èxit