La Basílica de la Virgen de los Desamparados acoge el tradicional Besamanos de la Patrona de Valencia. Este acto ha tenido lugar este miércoles, 24 de mayo, cuando a las 7 de la mañana han abierto las puertas para que los devotos puedan besar a la Geperudeta.
La lluvia con la que ha amanecido este miércoles la ciudad de Valencia no ha conseguido frenar el gran fervor que sienten los valencianos por la Mare de Deú. Los feligreses han asistido ataviados con paraguas para poder protegerse del agua durante el tiempo de espera, mientras hacían cola en la plaza de la Virgen hasta poder acceder al interior de la Basílica.
La Basílica cerrará sus puertas cuando pase la última persona que esté en la cola para realizar el Besamanos. Cabe destacar que el Besamanos seguirá todo el día hasta que pase el último devoto. De hecho, el pasado año no se cerraron las puertas de la Basílica hasta las 2,10 de la madrugada y pasaron ante la Virgen 24.000 personas, si bien el año récord fue en 2019, cuando se contabilizaron entre 26.000 y 27.000 devotos.
Un acto que tiene su vertiente solidaria. En este caso, los donativos que se recojan en el Besamanos, como siempre se hace en este acto, se destinarán a la obra social que impulsa la Basílica dirigida a la Fundación MAIDES, para la inserción social de personas con enfermedad mental grave y en riesgo de exclusión; Villa Teresita, que ayuda a personas en exclusión, especialmente mujeres marginadas, muchas en situación de abuso y/o víctimas de trata; y la asociación valenciana Provida, que atiende a madres en riesgo de exclusión y a sus bebés.
