En la Toscana valenciana se encuentra una bodega de corte tradicional, Daniel Belda, que siempre ha estado a la cabeza de la innovación y la modernidad. Esto es así, porque desde sus inicios han apostado por variedades autóctonas y foráneas adaptándolas de manera óptima a los suelos de esta zona.
El mimo que pone Daniel Belda en sus vinos, enólogo y propietario de la bodega de tradición familiar “Bodega J. Belda” fundada en el año 1931, convierten en este “celler” en uno de los más representativos de la DO Valencia, convirtiendo a sus vinos de autor en todo un referente de la calidad viticultora de la zona.
Sus viñedos, tienen sus raíces sobre una drenante costra caliza de textura franco-arenosa a los pies de la sierra, con una orientación sur y una altura de 600 mts., lo que caracteriza, sin duda, las vides de las que posteriormente surgen sus vinos.
Su pasión por lo que hace, no solo se plasma en sus excelentes caldos, también en las iniciativas de enoturismo que impulsa desde su bodega para crear una conciencia sobre el mundo del vino.