Las excavaciones efectuadas en la calle San Vicente descubren nuevos restos de la muralla islámica. Descubrimiento gracias a las obras de renovación de las canalizaciones de agua potable en este ámbito, que ya están prácticamente finalizadas.
El hallazgo se ha producido a la altura de la calle de San Fernando, en el tramo final de las obras, lo que ha obligado a variar la traza inicialmente prevista en el proyecto de la nueva tubería, y desplazarla lateralmente. Ello ha generado afecciones a otros elementos que se resolverán antes de la instalación de los tubos, dado que el resto de tubería está ya montada. Está previsto que las obras acaben el 1 de diciembre.
Los restos de muralla encontrados tienen unas dimensiones aproximadas de 30 metros. Corresponden a la cimentación y al antiguo valladar que discurría paralelo a la traza de la muralla. En estos momentos, el hallazgo está siendo valorado desde el Servicio Municipal de Arqueología.
Una vez documentado, se cubrirá con arena y con una manta geotextil para protegerlo de la erosión y el efecto de los agentes externos. Los restos se quedarán de nuevo bajo el pavimento, en el mismo sitio en el que han sido encontrados. El personal técnico municipal documentará todo el contenido arqueológico hallado.