La vacuna AstraZeneca sigue en el punto de mira de todas las autoridades sanitarias por los últimos trombos notificados. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha avalado la seguridad del fármaco inglés contra el coronavirus aunque ha admitido que sí hay un «posible vínculo» entre la vacuna y los casos de trombosis.
Según la EMA, han habido 18 fallecidos entre los inmunizados con el suero de Oxford. También se han contabilizado 228 embolias: 169 cerebrales y 59 abdominales. Sin embargo, se trata de un porcentaje de afectados por debajo del 1% ya que se ha suministrado entre millones de habitantes sin contraindicaciones.
La directora del organismo, Emer Cooke, ha remarcado que se trata de «efectos secundarios muy raros». Por ello, ha instado a las autoridades competentes a no paralizar la vacunación ya que señala que los beneficios siguen superando los riesgos.
No obstante, se ha pedido tanto a sanitarios como a vacunados estar alertas de síntomas sospechosos durante las semanas posteriores a la administración de la dosis. «Las personas que hayan recibido la vacuna deben pedir asistencia sanitaria de forma inmediata si desarrollan síntomas de la combinación de trombos y bajo nivel de plaquetas», ha recalcado.
LA UNIÓN EUROPEA TIENE LA ÚLTIMA PALABRA
A pesar de la recomendación de la EMA, ahora recoge el testigo la Unión Europea. Ésta deberá decidir con los 27 países miembros si se continúa con la vacunación o, por el contrario, se paraliza. Los ministros de Sanidad, incluida Carolina Darias, participarán en este encuentro telemático de carácter «urgente». Tras él tendrá lugar el Consejo Interterritorial para abordar la misma cuestión además del uso de mascarillas en las playas.
En España, Castilla y León ya ha decidido suspender la inmunización de esta vacuna por cautela. Pocos minutos después, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha desaprobado la medida. «Las decisiones de qué vacunas, con qué criterios sanitarios, en qué tramos y con qué calendario corresponden al Consejo Interterritorial de Sanidad», ha señalado.
LA COMUNITAT VALENCIANA SIGUE ADELANTE CON ASTRAZENECA
Por su parte, la consellera de Sanitat, Ana Barceló, ha valorado negativamente la suspensión en Castilla y León. La consellera ha reprobado la decisión de la Junta y considera que su unilateralidad «no es actuar con responsabilidad».
Barceló ha hecho hincapié en la necesidad de conocer la decisión de la EMA antes de actuar. «Tenemos un Consejo y acciones coordinadas. Las decisiones que se adopten tiene que ser para todo el territorio», ha sentenciado.
La responsable de Sanitat ha remarcado que «no se puede actuar con independencia». Además, descarta seguir los pasos de la Junta y paralizar la vacunación de AstraZeneca. «No me parece que sea la decisión más adecuada en estos momentos. Se tendría que adoptar en el Consejo Interterritorial si es que hay que adoptar o tomar alguna decisión».
