Los propietarios e inquilinos de las urbanizaciones Montesol, Monte Pino y Las Cumbres, de Gandia siguen esperando la ayuda por parte del ministro de Fomento, José Luis Ábalos. El Gobierno prometió destinar un fondo económico para paliar los daños sufridos en las viviendas de la Marxuquera que ardió en el incendio de Llutxent a principios del mes de agosto.
Asimismo, el ministro no descarta que se puedan modificar las condiciones por las que se conceden este tipo de ayudas, que, tal y como se establece ahora, son para rentas por debajo de los 10.500 euros y para primeras viviendas.
Ábalos visitó ayer la zona, acompañado de la alcaldesa de la Gandia, Diana Morant, y del delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, además de otros ediles y miembros del gobierno de Gandia.
Los vecinos, impacientes por no tener noticias sobre la gestión de la crisis durante el desalojo y tras el incendio, se acercaron para pedir explicaciones. De la misma manera, Julia, una vecina muy molesta por la pésima gestión se acercó a la alcaldesa y al ministro denunciando la falta de decisiones que se tomaron al respecto que se tomaron desde el Puesto de Mando Avanzado (PMA).
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha negado que hubiera descoordinación en el dispositivo de extinción del incendio de Llutxent. Para Puig, “fue un trabajo bien planificado y se consiguió el objetivo principal, que fue que no hubiera ningún tipo de desgracia personal”, según dijo el presidente en unas declaraciones.