Desde primera hora de la jornada del jueves el caos se ha apoderado de la ciudad de Valencia debido a la paralización del servicio de taxis por una mala programación de los taxímetros. En concreto, más de 1.000 taxistas se vieron afectados al inicio de su jornada laboral cuando conectaron el taxímetro y vieron que la tarifa, marcada en el dispositivo por defecto y que no pueden manipular, era la tarifa 2 como un día festivo.
“Nos parece inaceptable lo ocurrido en Valencia con nuestro sector. No sólo no hemos podido dar el servicio que el ciudadano demanda en plenas Fallas, sino que para colmo muchos de mis compañeros se han ido a sus casas multados por los agentes de la Policía Local que han decidido no averiguar lo que estaba pasando y que no era suficiente con una simple advertencia”, asegura la presidenta de la Plataforma de Afectados por la Nueva Ley del Taxi, Isabel Segura.
En total, “calculamos que el fallo en la programación de los taxímetros ha generado pérdidas al sector de más de 150.000 euros”, añade la presidenta que además adelanta que van a pedir daños y perjuicios por lo ocasionado.
Al final el mayor perjudicado ha sido el ciudadano que en el primer día de Fallas ha visto cómo ha sido misión imposible encontrar un taxi que ofreciera servicio. Desde la Plataforma de Afectados por la Ley del Taxi aseguran que les parece inconcebible la actitud de la administración ya que en vez de intentar solucionar el problema señalan que ha decidido cargar contra el taxista, sin preocuparle si Valencia se quedaba sin taxis.
“Los taxistas no hemos podido dar el servicio que la población necesitaba porque no nos han dejado”, concluye Isabel Segura. Desde el sector del taxi han exigido a los técnicos que revisen la programación aprobada para el resto del año para evitar un nuevo caos en el servicio como el que los vecinos han tenido que sufrir en Valencia.