La ciudad de Valencia podría volver a tener vuelo directo con Estados Unidos. El Ayuntamiento ha comenzado a trabar en nuevas conexiones aéreas internacionales con el objetivo de impulsar la capital del Turia y «posicionarla a nivel internacional».
Así lo destacaba esta semana la concejala de Economía y Grandes Proyectos, Paula Llobet, tras haberse reunido ayer con Frederick Schenk, director para el Sur de Europa de Delta Airlines; Fernando Álvarez, director de ventas corporativas de Air France/KLM España; Sandrine Salomon, directora regional de la misma compañía; y Miguel Ángel Pérez, director de Visit Valencia.
En esta primera toma de contacto, Llobet subrayó que «el objetivo es mejorar e incrementar las conexiones que tenemos a día de hoy con otras ciudades e incluso con otros continentes como el americano». En este sentido, la concejala destacó que según los datos «a nivel turístico la presencia norteamericana es cada vez más importante».
Desde inicios de 2023 la llegada de turistas estadounidenses se ha ido incrementando hasta alcanzar en mayo un 40,4%, más que antes de la pandemia. Además, junio se ha posicionado como el mejor junio de la serie histórica previa a la COVID-19 con una media de ocupación del de 87,5%, mejor que en 2019.
Todos estos datos, según Llobet, «refuerzan a Valencia como uno de los principales mercados en materia turística que bien merece incrementar sus oportunidades a través de nuevas conexiones que aumenten el número de destinos a los que viajar y el número de potenciales visitantes que recalen en la ciudad para visitarla e, incluso, como puerto base de cruceros por el Mediterráneo».
CONEXIÓN DIRECTA CON NUEVA YORK
Ya han pasado diez años desde que Valencia dejase de tener conexión directa con Nueva York. Fue la entonces alcaldesa, Rita Barberá, quien impulsó esta ruta aérea que conectó durante tres años la capital del Turia con la Gran Manzana.
De 2009 a 2012 cuatro frecuencias semanales por precios de 400-500 euros ida/vuelta conectaban Valencia y Nueva York. La compañía Delta Airlines, la misma que ayer se reunía con Llobet, era la operadora responsable de estos vuelos. Sin embargo, dejó de operar por falta de rentabilidad a pesar de que las cifras señalaban una ocupación media superior al 80%.
En 2015 ya se trabajó desde Turismo Valencia en tratar de recuperar la conexión directa. Aunque se habló de volver restablecer los vuelos directos en 2017, las negociaciones nunca llegaron a prosperar.
El pasado verano, el ya exsecretario autonómico socialista de Turismo, Francesc Colomer, anunció su voluntad de restablecer la conexión aérea. El socialista insistió en restaurar la ruta para atraer al mercado norteamericano por «su capacidad de gasto y por su interés por la cultura y la gastronomía».
