La influencer Stephanie Matto vende frascos del sudor de sus pechos, cobra 500 euros por cada frasco. Con tan solo 31 años ha conseguido una fortuna vendiendo frascos con el sudor de sus pechos. Esta joven se dio a conocer por un reality de televisión y por vender sus flatulencias.
Anteriormente, la joven vendía tarros con sus ventosidades. Llegó a ganar unos 44.000 euros a la semana. Tuvo que parar esta iniciativa por un problema de salud, por la gran acumulación de gases en su cuerpo.
Matto asegura que vende unos diez tarros cada día. «Me encanta sentarme junto a la piscina y llenar los frascos con el sudor de mis senos. Pero también es un trabajo duro, no se dejen engañar», afirma. Para vender los frascos del sudor asegura en sus redes «Será un verano de chicas calientes y mis pechos están sudando. ¡Así que embotellemos y vendamos!«. Las redes sociales se han llenado de comentarios donde se ríen de todos aquellos que compren este tipo de productos. El fenómeno fan no tiene límites.