El diésel se ha convertido en el combustible de la polémica, en teoría por su alta contaminación. El Gobierno le ha declarado la guerra y la inseguridad se traslada a los números de ventas.
El sector de automóviles está en auge pero no si hablamos de este combustible. A día de hoy su presencia en las carreteras es de un 37%, una cifra destacable si se compara a 2016 cuando el 60% de los coches eran vehículos diésel.
Desde el sector automovilístico son muy claros: el diésel contamina pero únicamente en los coches fabricados hace más de diez años. Aseguran que la fabricación de motores ha avanzado y que un nuevo diésel contamina menos que los coches de gasolina.
Pero, ¿Qué hacer si todavía se tiene dudas a la hora de adquirir un vehículo? Acudir a un concesionario de confianza es la mejor herramienta de información antes de apostar por un diésel o gasolina. Los profesionales de la automoción afirman que un buen asesoramiento ahorrará dinero y es que la decisión del carburante dependerá del tipo de uso que vayamos a darle a nuestro coche.