El crimen del canónigo emérito de la catedral de Valencia se complica. Pese a que el presunto autor del crimen ya está detenido y se encuentra en prisión provisional, comunicada y sin fianza, la investigación del homicidio del sacerdote no da tregua.
Según han relatado tanto desde el diario Las Provincias como Levante EMV, Alfonso López Benito, de 85 años, habría mantenido relaciones sexuales en su vivienda con un joven discapacitado de 34 años horas antes del asesinato.
Al parecer, el pasado verano el sacerdote conoció en la estación de autobuses de Valencia a un hombre con una discapacidad intelectual del 43% residente a unos 700 kilómetros de la capital del Turia.
Tras hablar con él e invitarle a un café, el canónigo le pidió su número de teléfono para permanecer en contacto. Por lo que ha trascendido, López merodeaba esta zona de la ciudad buscando personas vulnerables para poder mantener encuentros sexuales con ellos.
EL CANÓNIGO SE OFRECIÓ A SUFRAGAR EL VIAJE DEL JOVEN
Un tiempo después, Alfonso López contactó con el hombre para invitarle a Valencia con la posibilidad de poder alojarse en su casa, ubicada en la calle Avellanas 22, además del ofrecimiento de pagarle el transporte.
El viaje se produjo el viernes 19 de enero aunque finalmente el joven viajó con unos billetes de autobús pagados por su expareja. Tanto el sacerdote como un hombre de nacionalidad rumana que era de su confianza recogieron al chico y lo alojaron en su domicilio.
Al reconstruirse las últimas horas de vida del canónigo, la policía descubrió que el joven discapacitado compartió cama con Alfonso la noche del viernes y la del sábado 20 de enero. Fue en la segunda cuando el sacerdote se le habría insinuado y mantenido relaciones sexuales con el chico.
Habría sido alrededor de 24 horas después de este suceso cuando el canónigo fue asesinado aunque todavía no ha podido establecerse la hora exacta de defunción.
