El Ayuntamiento de Valencia anunciaba este miércoles a bombo y platillo el cobro de un recargo del 30% en el IBI a los grandes propietarios con más de diez viviendas vacías en la ciudad. Según el consistorio, el objetivo no es recaudatorio sino conseguir más viviendas en alquiler para bajar los precios.
Sin embargo, la medida tiene muy difícil reconducir el mercado inmobiliario. El Partido Popular la ha calificado de «auténtico fiasco y fracaso». Según han desvelado a través de datos del propio gobierno municipal, en Valencia hay más de 57.000 pisos vacíos. No obstante, de esas miles de viviendas sólo 41 pisos de 6 propietarios se verán afectados. «Una cifra ridícula que para nada va a solucionar la bajada de los alquileres», señalaba el concejal del PP, Juan Giner Corell.
Giner Corell ha señalado que lo más grave es lo que no ha dicho el gobierno de Ribó y PSOE. Según ha apuntado, el propietario de Valencia con más viviendas vacías es el mismo Ayuntamiento con 175 pisos sin ocupar.
«Debería empezar por sacar al mercado estos 175 pisos y a precios asequibles. Sería una manera más eficaz de reducir los precios de alquiler en la ciudad y poder dar respuesta a las más de 3.500 familias que están en la lista de espera para conseguir un alquiler asequible«, ha explicado el concejal.
Desde el PP han advertido que para rebajar el coste del alquiler hay que poner en marcha la construcción de viviendas públicas. «Pero el gobierno de Ribó y PSOE sólo han hecho 14 pisos en ocho años», han criticado.
SANJUÁN: «EL LISTADO ES DINÁMICO, IRÁ INCREMENTÁNDOSE»
El concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, ha sido el responsable de anunciar la medida municipal. Ha explicado que Valencia, como otras grandes ciudades españolas, sufre un mercado del alquiler «muy tensionado». Este afecta «a las personas trabajadoras y muy especialmente a las personas jóvenes a la hora de poder emanciparse».
El regidor ha señalado que aunque las «causas de esta escasez de oferta de vivienda son varias, hay una evidente sobre la que tenemos que actuar que es el impacto que están teniendo tanto la reconversión de viviendas a apartamentos turísticos como el acopio de viviendas por parte de fondos de inversión o fondos buitre».
Sobre las 41 viviendas, Sanjuán ha admitido que «no es un número determinante». Sin embargo, ha matizado que «marca la hoja de ruta y ofrece una radiografía de la situación en la ciudad».
El concejal de Hacienda ha reconocido que no es la medida que va a solucionar todos los problemas de vivienda «pero es una medida que deja claro que quienes vienen a especular con la vivienda en lugar de tenerla como un derecho lo van a tener muy difícil en la ciudad de Valencia».
Sanjuán ha explicado que «el listado es dinámico e irá incrementándose». Además, ha remarcado que es un proceso con «todas las garantías». «Los grandes tenedores pueden alegar y pueden sacar las viviendas al mercado que es en el fondo el objetivo de esta medida, que no está hecha para cobrar más, está hecha para que no haya viviendas vacías. Cada vivienda vacía que salga al mercado para no pagar este recargo en el impuesto es un éxito».