La Familia Real posa delante del restaurante Albufera con su equipo y vecinos. / Restaurante Albufera

La Familia Real protagonizaba ayer una visita por sorpresa a Catarroja, una de las localidades más afectadas por la DANA. Durante su jornada, los Reyes Felipe VI y Letizia, junto a la princesa Leonor y la infanta Sofía, realizaron una parada en el restaurante Albufera, un establecimiento emblemático de la gastronomía local ubicado en El Palmar.

Este gesto, además de ser una muestra de apoyo a la restauración tradicional, sirvió como respaldo a la recuperación económica del Parque Natural de la Albufera, que, aunque no sufrió daños directos durante la riada, ha experimentado una notable disminución en el número de turistas.

El restaurante Albufera es todo un referente en la gastronomía valenciana desde 1963, especializado en arroces y mariscos, y conocido por su emblemática paella Albufera, la que degustó ayer la Familia Real.

Este arroz seco combina ingredientes tradicionales como el pollo, el conejo, los caracoles y las alcachofas, con un toque innovador: el pato. El local, que se encuentra en la Plaza de la Sequiota, es un clásico para los amantes de la cocina valenciana y mantiene una gran popularidad tanto entre los residentes como los turistas.

Durante su visita, la Familia Real se acomodó en una de las mesas centrales del salón principal, rodeados de otros comensales, y se mostró cercana y accesible, interactuando de manera amena con los clientes presentes, tal y como relataron los trabajadores del restaurante en declaraciones recogidas por Las Provincias.

Un acto simbólico de apoyo a la recuperación local

La visita real no solo tuvo un significado gastronómico, sino también simbólico. Los Reyes y sus hijas aprovecharon el encuentro para interesarse por la situación de los hosteleros de El Palmar, quienes, a pesar de no haber sufrido daños materiales durante la DANA, han visto un importante descenso del turismo.

En este contexto, la visita de los monarcas se convierte en un acto de solidaridad con los empresarios locales, que han tenido que hacer frente a una grave crisis económica derivada de la caída del turismo.