Nos trasladamos hasta la década de los 60 en Estados Unidos. Época en la que la llamada “tierra de la libertad” podía castigar a un adulto con entre 5 y 20 años de prisión por mantener relaciones homosexuales. No fue hasta el 28 de junio de 1969 cuando la crispación por este rechazo social acabó en los famosos disturbios de Stonewall, el bar neoyorquino donde se originó el Día del Orgullo Gay.
Este año la cita tiene una doble celebración y es que se cumplen 50 años de los disturbios y 40 desde la primera manifestación por el orgullo que tuvo lugar en Valencia. Por eso la reivindicación de este 28-J es clara y centra su mirada en la salida del armario de las personas mayores y en la memoria histórica del colectivo. Todo ello acompañado de una novedad: el deporte.
Sensibilizar en materia trans y terminar con las agresiones verbales y físicas son otras de las reivindicaciones que se realizan durante el 28-J. Y es que en el siglo XXI todavía se denuncian ataques contra este colectivo.
Si en 2018 fueron 30.000 participantes en Valencia este año la cifra podría aumentar a 40.000 ciudadanos. Todos ellos se darán cita este sábado en Porta la Mar, allí arrancará a las 19 horas una marcha que finalizará en la plaza del Ayuntamiento con una fiesta nocturna (22h.) a favor de la igualdad.
