La primera semana de julio ha llegado con gran inestabilidad meteorológica y ha dejado borrascas que han descargado con fuerza. Estas tormentas no han estado solas y una espectacular granizada ha caído en amplias extensiones de terreno a lo largo de nuestra geografía.
La comarca de Utiel-Requena ha sido una de las zonas más perjudicadas. Según datos de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), la tormenta del lunes dañó un total de 1.000 hectáreas de Sinarcas, Camporrobles y Utiel. A esto se sumó el pedrisco de anoche cuando 5.000 hectáreas de cultivo quedaron anegadas en el municipio de Requena.
Desde Agroseguro ya han avanzado que las peritaciones de los daños se realizarán con celeridad. Además, comenzarán por aquellos cultivos cuya recolección es inminente, como en los cereales. En cualquier caso, para una óptima planificación de las tasaciones, el sistema español de Seguros Agrarios Combinados ha matizado que es importante que los agricultores remitan los partes de siniestro tan pronto constaten los daños en sus cosechas.
Por otra parte, Agroseguro ha recordado que el pedrisco es uno de los riesgos que más afecta al sector agrario. Para hacernos una idea de cómo incide, basta decir que en los últimos cinco años Agroseguro ha abonado en total casi 1.000 millones de euros en indemnizaciones por tormentas de pedrisco. En concreto, hasta las tormentas de esta semana, las zonas siniestradas por pedrisco superan ya las 130.000 hectáreas.
LA GRANIZADA PERJUDICA A TRES AUTONOMÍAS MÁS
Al margen de la Comunitat Valenciana, hay otras tres autonomías afectadas por el temporal. En Aragón las tormentas de las últimas 48 horas han dejado siniestros en la comarca turolense del Bajo Aragón. Especialmente se han dañado producciones de melocotón de municipios como Calanda. Respecto al cereal, cultivo importante en la zona, se esperan daños puntuales ya que la mayor parte de la producción se encuentra recogida.
En Castilla-La Mancha se están registrando siniestros tanto por pedrisco, como por lluvias e inundaciones. Las provincias más afectadas son Cuenca, con especial incidencia en las comarcas de La Manchuela y Serranía; y Albacete, fundamentalmente en la comarca Centro, en los alrededores de la capital, y en la comarca Almansa.
También han sido importantes las tormentas caídas en Guadalajara. Sobre todo en las comarcas de la Alcarria Alta y Molina de Aragón. Los cultivos que presentan los mayores daños son la uva de vino y los cereales. Si bien, también se han visto afectados otros cultivos como el melón, la adormidera y otros cultivos hortícolas.
Por su parte, en Castilla y León se han registrado tormentas de pedrisco en las nueve provincias, aunque los daños son puntuales en todas ellas, salvo en Zamora, donde las comarcas situadas al sur de la provincia (Sayago, Tierra del Viño y La Guareña) presentan daños en cereal, y en la comarca burgalesa de la Ribera, donde se esperan daños, tanto en cereal como en uva de vino.