AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, participa en proyecto FOAM2FOAM cuyo objetivo es la obtención de materias primas a partir de residuos de poliuretano que hasta ahora acababan en vertedero o se reciclaban mecánicamente para obtener productos de escaso valor añadido.
El poliuretano es un material que se presenta en multitud de formas, desde las más flexibles hasta otras muy rígidas, pasando por otras que destacan por su ligereza. Precisamente por ello tiene numerosas aplicaciones, que van desde los espumados para automoción o mobiliario, pasando por envases, hasta aislamientos para construcción, electrónica o en forma de suela de calzado deportivo.
El hecho de que no tenga una logística sencilla por su variada procedencia, y de que suela estar muy mezclado con otros materiales, hacía que la mayor parte de las veces acabara en vertedero y que su reciclado hasta ahora se realizara por la vía mecánica con la obtención de un material de escaso valor añadido.
El objetivo del proyecto FOAM2FOAM, que se enmarca en la convocatoria nacional de I+D Retos Colaboración, y cuenta con la financiación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, es aplicar el reciclado químico a estos residuos descomponiendo el material con calor, químicos o catalizadores en un proceso denominado glicólisis catalítica que permite obtener nuevas materias primas denominadas polioles verdes. De esta forma, se evita recurrir a materias primas de fuentes no renovables para fabricar nuevos productos.
El objetivo del proyecto es escalar el proceso a nivel de planta piloto y analizar su eficiencia. Para ello se ha creado un consorcio liderado por Titan Recycling Solutions, en el que también participan Arcesso Dynamics y AMB Electrónica de Brescia en el que también participan los centros tecnológicos Gaiker y AIMPLAS.
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