El invierno coge cuerpo en Valencia con la llegada de una nueva ola de frío. La provincia ha arrancado la semana con nivel máximo amarillo por bajas temperaturas. Además, se espera que la situación se prolongue con unas jornadas de frío extremo.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha reactivado la alerta amarilla esta madrugada al igual que ya sucedió el fin de semana. Valencia ha amanecido con «temperaturas significativamente bajas» de -8,5º en el Rincón de Ademuz y de hasta -4º en el interior sur de la provincia. Al frío polar se han unido heladas generalizadas en el interior y con carácter débil en puntos del prelitoral.
Seguimos con noches frías, con heladas en el interior que han sido localmente fuertes (temperatura inferior a -8 ºC). Mínimas hoy:
Ademuz: -8.5
Villena: -8.1
Jalance: -6.6
Fontanars dels Alforins: -6.5
Utiel: -5.4
Vilafranca: -4.8
Pinoso/el Pinós: -4.5
Chiva (la Pailla): -4.5— AEMET_C. Valenciana (@AEMET_CValencia) January 17, 2022
Aemet ha desactivado la alerta a primera hora de la mañana. Sin embargo, esta madrugada volverá a reactivarse el aviso que en esta ocasión alcanzará también a la ciudad de Valencia. Esta medianoche toda la provincia estará bajo riesgo amarillo por temperaturas mínimas.
En la capital del Turia los mercurios se desplomarán hasta rozar los 0 grados. Más acusado será en localidades del interior llegando a los -4º en Requena y los -6º en el Rincón de Ademuz. La alerta se mantendrá activa hasta pasadas las 09:00 horas. El cielo estará poco nuboso o despejado con intervalos de nubes bajas en el litoral al final del día. Además, volverán las heladas generalizadas en el interior y con carácter débil en puntos del prelitoral.
LA NIEBLA ENGELANTE LLEGA A VALENCIA
Para el miércoles no se esperan alertas de momento. Sin embargo, Aemet ha avanzado que a las brumas matinales se sumarán posibles bancos de niebla engelante. Según explican, se trata de una niebla formada por gotitas de agua subfundida, es decir, gotitas que permanecen en estado líquido a temperaturas inferiores a los 0º. Dichas gotas, al impactar contra la vegetación, la superficie u otros objetos, se congelan dando lugar a depósitos de hielo conocidos como cencellada.
