pederasta

Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos peligrosos pederastas que figuraban entre los más buscados a nivel internacional. Los arrestos han tenido lugar en Gandía y Gijón. La investigación empezó hace casi dos años tras ubicar en España el escenario de unas imágenes donde se mostraban graves abusos sexuales a una niña de 5 años. Tras lograr su detención, los agentes constataron su presunta participación en otros hechos similares. Este hecho permitió identificar a su “mentor”, otro pederasta con un gran prestigio y reputación en la comunidad pedófila. Pese a la relación de confianza existente entre ellos, uno de los detenidos no dudó a la hora de acceder ilegalmente al equipo informático del otro.

Los agentes consiguieron identificar al mentor, un depredador sexual, comprobando que se trataba de un varón de 30 años de edad y residente en Gandía. Los agentes iniciaron una estricta vigilancia policial, constatando que se quedaba al cuidado de las hijas de su pareja, de 8 y 11 años. Por lo que, ante la situación de grave riesgo real y actual para las menores, se solicitó la diligencia de entrada y registro en el domicilio. Los agentes acreditaron la posesión de material pedófilo almacenado en una memoria USB con programas de encriptación.

Los investigadores destacan la peligrosidad del pederasta detenido

Los investigadores destacan la peligrosidad del pederasta detenido, afirmando que seleccionó a la madre de las dos niñas como pareja. Buscaba una familia monoparental y desestructurada, ya que le aseguraba estar en disposición de las menores durante mucho tiempo. Destacar que durante la investigación incluso se convirtió en el tutor de las dos hijas de su pareja, dado que ésta ingresó en prisión por hechos ajenos a la investigación.

La investigación se inició en el mes de mayo del 2018. La Policía de Australia publicó varias fotografías descubiertas en la red en las que se observaba a una menor que estaba siendo abusada sexualmente. Analizadas las fotografías, los investigadores establecieron que la menor podía encontrarse en nuestro país. Las pesquisas llevadas a cabo por los agentes permitieron localizar el escenario de las imágenes en una localidad alicantina. Además de identificar al presunto autor de los hechos y a la víctima, una niña de 5 años de edad perteneciente a su círculo familiar.