Este viernes la consellera de Sanitat, Ana Barceló, ha adelantado las medidas que modificarán la normativa sanitaria contra la COVID-19 de cara a la celebración de las Fallas. Barceló ha asegurado que esta modificación es de carácter «puntual y específica» y que su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) se producirá hoy mismo.
Este cambio permitirá la celebración de las Fallas, así como los pasacalles y la presencia de músicos, pero bajo estrictas medidas. La mascarilla será obligatoria en todo momento, incluso al aire libre. Las actividades estáticas deben asegurar una distancia de 1,5 metros entre personas y las itinerantes que no se produzcan aglomeraciones. No se permitirá la realización de verbenas, karaokes y similares.
Además, se modificarán algunos itinerarios tradicionales. El objetivo, reducir los embotellamientos. También recuerdan que no esta permitido el baile ni en interiores ni en exteriores.
En cuanto a los casales falleros deberán cumplir las mismas medidas que la hostelería. El aforo máximo en interiores es del 50% y en exteriores del 100%. Las mesas deben estar separadas por 2 metros y no deben superar las 6 personas en interior y las 10 en exterior. La actividad deberá terminar antes de las 00.30h.
La consellera ha asegurado que en la Comunitat Valenciana «vamos por buen camino». El descenso de casos es paulatino pero «no podemos relajarnos». Recuerda Barceló que «cada vez que nos hemos relajado en las medidas de seguridad aparecen brotes y repuntes». Además, es consciente de que «todo el mundo nos mira», al ser las primeras fiestas de Fallas en este contexto.
Esta modificación estará vigente hasta el próximo 6 de septiembre. Antes de esa fecha, volverá a celebrarse otra reunión de la Interdepartamental para estudiar las nuevas medidas.
RESPONSABILIDAD DE LOS AGENTES COVID Y POLÍCIA LOCAL
La consellera ha querido recordar también que el resto de restricciones para la lucha contra el coronavirus siguen activas y que extremar las precauciones depende de todos. En este sentido, cada falla ha nombrado un agente COVID que ha sido formado de manera específica. El objetivo, el máximo control.
Al respecto al resto de espacios públicos, como puede ser la Plaza del Ayuntamiento, Barceló delega la responsabilidad en la Policía Local y el Ayuntamiento.