Los menús de los colegios y escuelas infantiles de gestión municipal cambiarán para el próximo curso. Las recetas con productos locales, frescos y producidos de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente serán las protagonistas. Así se desprende del nuevo pliego de condiciones que determinará la licitación de este servicio que ha atendido a más de 1.000 niños de Valencia en el curso 21/22.
La concejala de Educación, Maite Ibáñez, ha presentado hoy las novedades de este contrato. «Apuesta por las mejoras técnicas, más que por las económicas; fomenta la alimentación saludable; beneficia la economía local e impulsa los comedores escolares como espacios educativos».
Dado que el nuevo pliego premiará la calidad a la economía, es probable que los nuevos menús supongan un aumento del coste de la comida. Sin embargo, desde el consistorio ya han dejado claro que en ningún caso se incrementarán las tarifas a las familias. «El incremento del coste del servicio no va a repercutir en las familias, lo asume el Ayuntamiento», ha explicado Ibáñez.
Cítricos, arroz y aceite de Valencia
Los nuevos menús escolares tienen que contener verdura fresca y de temporada a diario. Además, como mínimo el 50% de estos productos serán obligatoriamente ecológicos. En el caso de las naranjas y mandarinas, el 100%.
Concretamente, los cítricos tendrán que de ser valencianos; el aceite de oliva de Denominación de Origen de la Comunitat Valenciana; y el arroz de Valencia. «Así se intentará acortar el canal de distribución para no encarecer los productos y mejorar su frescura», ha resaltado Ibánez.
Por lo que respecta a la configuración del menú, se servirá de 1 a 3 veces por semana pescado siendo una de ellas fresco. También se limitará al mínimo el consumo de productos precocinados o fritos con un máximo 3 veces al mes.