Países Bajos o Alemania son algunos puntos del continente europeo en los que fumar cannabis está permitido, en el primero de manera libre con los conocidos Coffe Shops mientras el segundo únicamente con receta médica para uso medicinal.
Este sería el supuesto de Valencia ya que Les Corts Valencianes tiene previsto crear una comisión especial con el objetivo de estudiar la mejor manera para facilitar el acceso al cannabis y el derecho al cultivo propio a todos aquellos ciudadanos que lo requieran por cuestiones terapéuticas.
Esta comisión tiene su origen en una propuesta del Pacte del Botànic que ha conseguido salir adelante con la aprobación del PSPV, Compromís y Podem a pesar de la negativa del Partido Popular que señala que esta medida sólo busca «regular el uso recreativo». Ciudadanos por su parte ha apoyado la propuesta tras haberse aceptado la enmienda que habían realizado.
Desde el hemiciclo valenciano se ha defendido la apertura al debate sobre estas sustancias para superar «los prejuicios» y señalar que la prohibición no es la forma de evitar el consumo asegurando que en España hay más de 2.000.000 de consumidores y cerca de 500.000 personas que cultivan cannabis.
