Un total de 1,2 millones de unidades de claveles del campo valenciano protagonizarán la tradicional Batalla de Flores. Con este acto, en el que desfilarán 40 carrozas, desde las cuales se proyectarán e intercambiarán con el público los mencionados clavellones, se cerrará un año más la programación de la Gran Fira de València.
Como marca la tradición, el festejo que data de 1891 se celebrará el último domingo de julio, día 30, en el Paseo de la Alameda a las 20:00 horas. El concejal del área de Cultura Festiva, Santiago Ballester, ha manifestado hoy que este acto «valora el trabajo artesano y las técnicas de cultivo de los floricultores, capaces de recolectar las 1.200.000 unidades de claveles del campo valenciano».
Este cultivo se lleva a cabo en fincas de 30 fanegadas repartidas en campos de Alboraya, Meliana y Alcàsser, entre otras localidades. El miedo a que una granizada eche a perder el cultivo motiva la necesidad de elegir varios lugares de producción.
Ballester ha recordado que «la prolongada época de floración y la duración de los claveles una vez cortados son las claves del éxito». Según ha destacado, las semillas del clavel se siembran exclusivamente para la Batalla a principios del mes de marzo y son recogidas a finales de julio. «Son cinco meses de cultivo si no hay inclemencias atmosféricas que puedan lanzar a perder las 100.000 unidades de plantas», ha aclarado.
ESPÍRITU FALLERO EN LA BATALLA DE FLORES
En cuanto a las carrozas, el concejal ha detallado que este año desfilarán en estos vehículos, engalanados también con flores, niñas y mujeres preseleccionadas para formar parte de las cortes de honor de las Falleras Mayores de Valencia de 2024.
Además, irán representantes de varios sectores falleros y las Falleras Mayores de Valencia de 2023 y 2022, con sus respectivas cortes de honor, así como la Bellea del Foc, y la reina de las fiestas de Castelló. Como en años anteriores, también participan como invitadas con dos carrozas las Fallas de l’Horta Sur y representantes de asociaciones festivas del Cap i Casal.
Según manda la tradición, todas estas personas que lanzarán flores desde las carrozas recibirán otras que proyectarán quienes ocupen las lonjas habilitadas para el público en el paseo de la Alameda.
