El único puesto de churros y buñuelos sin gluten está en el centro de Valencia
El puesto de 'Churrosnumerosos' apto para celiacos

Valencia se vuelca con las personas celíacas en sus fiestas más emblemáticas. Como en ediciones anteriores, la ciudad cuenta con un puesto de churros y buñuelos sin gluten, garantizando que quienes padecen esta afección también puedan disfrutar del dulce sabor de las Fallas.

Este establecimiento, ubicado en la esquina de la calle Jesús, 41, es una iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Valencia y la Asociación de Celíacos de la Comunidad Valenciana (ACECOVA). Además, el laboratorio municipal de Valencia certifica la aptitud de los productos con rigurosos análisis, que desde 2014 han dado siempre resultados satisfactorios.

Hay relevo generacional en la churrería

La empresa ChurrosNumerosos.com, especializada en la elaboración de productos tradicionales sin gluten, es la responsable de esta churrería itinerante. Este año, la churrería vive un relevo generacional: Jesús Manuel Ruiz, histórico propietario y alma máter del puesto, se retira tras 15 años de dedicación. Su sucesor, Óscar Sánchez, un ciudadrealeño de 36 años, asume el reto con la ilusión de mantener la calidad y la tradición.

Sánchez cuenta con experiencia en el sector y ha recibido la formación de su predecesor, quien le ha transmitido la famosa «fórmula secreta» de la receta. Esta combinación de harina de arroz y trigo frita en aceite de oliva ha conquistado a los valencianos, que hacen largas colas para degustar los productos sin gluten.

Puesto de ChurrosNumerosos.com

El precio de los productos se mantiene estable, sin subidas abusivas, para garantizar que todos los celíacos puedan acceder a ellos sin dificultad. Además, Ruiz ha agradecido el apoyo de los vecinos y de la Falla Marqués de Zenete por su colaboración en la instalación del puesto.

Aunque este año marca su despedida, Jesús Manuel Ruiz ha confirmado que volverá en 2026 para ayudar con el montaje y brindar su apoyo en los días clave de la Semana Fallera. Su legado sigue vivo en las Fallas y en cada churro y buñuelo sin gluten que continúan endulzando la fiesta.