La Comisión Europea ha dado luz verde a un paquete regulatorio para unificar las normativas de los estados miembros y, a su vez, mejorar las normas de seguridad de las aeronaves tripuladas (VTOL). De esta manera la Unión Europea está cada vez más cerca de poder utilizar los ‘taxis aéreos’ y los drones no tripulados. Según ha asegurado la comisaria de Transportes, Adina Valean, «promete desbloquear el potencial de la movilidad aérea, estableciendo nuevos estándares para el transporte urbano del siglo XXI y más allá».
En concreto, la presente normativa establecerá varios requisitos para poder obtener la certificación de dichas VTOL. Para ello, se llevará a cabo un proceso en el cuál se primará la integridad física de los pasajeros, así como la posibilidad que tenga la nave de sufrir un ciberataque afectando al correcto desarrollo del viaje. De igual modo, Bruselas pretende fijar las trayectorias del vuelo, al igual que las normas de despegue y aterrizaje de las aeronaves.
¿En qué consisten estos vehículos?
Son móviles que emplean propulsión eléctrica y, además están habilitados para despegar y aterrizar de forma vertical, de tal modo que se evitaría el tráfico o atascos que se pudiesen ocasionar. Suponen que la primera aparición de estos taxis aéreos sea en los Juegos Olímpicos de París 2024, en los que se puedan emplear estos vehículos para operaciones de rescate y al mismo tiempo faciliten los servicios médicos de urgencia.
Los turistas que decidan atender este evento deportivo de influencia mundial podrán emplear estos vehículos por primera vez para desplazarse entre las distintas sedes que alberga la capital francesa. Integrarán distintas plataformas en varias estructuras de París, en las que podrán despegar y aterrizar en ellas. Pese al optimismo ante esta innovadora idea y, tras evaluar la situación, los taxis aéreos no podrán ser realidad en la UE hasta 2030.
EASA, la Agencia de la UE para la Seguridad Aérea, ha asegurado que estas naves estarán pilotadas por un único piloto o pilotadas de forma remota. Además confirma que para poder ofrecer servicios primero necesitarán una certificación por parte de la Agencia. Según la normativa empleada por la Comisión Europea, las rutas empleadas por los taxis voladores se hará con el reglamento del espacio aéreo no tripulado. EASA calcula múltiples ventajas con el funcionamiento de este transporte ya que están diseñados para mantener al mínimo las emisiones ambientales. Asimismo, ofertará empleo a más cien mil personas miembros de la Unión Europea.