Víctor López disputará la carrera de motos más mortífera del mundo, se trata de la Isla de Man. Una carrera de motos considerada la más peligrosa del mundo. La prueba en una isla principal y algunos islotes situados en el mar de Irlanda, tendrá lugar en los próximos días.
El piloto quiere ganar la prueba centenaria en la que 265 pilotos han perdido la vida lo largo de su historia. El año pasado fallecieron cuatro personas. Ha manifestado a varios medios de comunicación que tiene miedo y que «los momentos previos son los más difíciles». Asegura que conoce de memoria cada curva de la isla que da nombre al TT (Tourist Trophy), un circuito de 60 kilómetros que durante casi tres décadas era una prueba puntuable del mundial.
En 112 años solo hubo una edición en la que no se registró ningún fallecido. Víctor corre este año en dos categorías, tiene opción de ganar en motos de 650 centímetros cúbicos y 140 caballos.