Valencia se está quedando sin playas. La fuerte erosión que están sufriendo conlleva que cada año el agua engulla más y más arena del litoral. El proyecto de Regeneración de playas de la Dirección General de Costas dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, es la tabla de salvación para las playas del Sur de Valencia que en la actualidad están sufriendo una regresión imparable desde hace años.
Aunque la compleja operación de regeneración debería haberse iniciado a principios de este 2023 para que las obras no hubieran afectado a la temporada de baño, los problemas burocráticos y la complejidad técnica del proyecto, entre otros, han retrasado las obras.
Los trabajos se iniciarán en breve, concretamente en plena temporada de verano. Esto ha propiciado que algunas playas como la de L’Arbre del Gos hayan perdido el distintivo de Bandera Azul, lo que ha alzado polvareda en el Ayuntamiento de Valencia.
La dirección general de Costas justifica la medida en que, al estar financiada con fondos europeos, debe de estar ejecutada antes de diciembre. Por otro lado, indican que se trata de una actuación histórica que frenará la erosión del litoral sur de Valencia. Aún así, fuentes gubernamentales señalan que «se harán los trabajos con las mínimas molestias posibles para los bañistas».
Recuperar las playas de 1965 con 28 millones de euros
El período de obras tendrá una duración de 6 meses y una inversión de más de 28 millones de euros, lo que permitirá a la capital del Turia recuperar las playas del sur que tenía en 1965.
Aunque el grueso de las obras está previsto para septiembre, los trabajos preventivos comenzarán en pocas semanas. Su objetivo principal es la regeneración del frente costero de las playas de L’Arbre del Gos, El Saler y Garrofera.
Las actuaciones pasarán por recargar artificialmente la playa con arena hasta conseguir un ancho de entre 40 y 70 metros, según las zonas. El volumen de arena submarina a aportar superará los 2,9 millones de metros cúbicos.