Los últimos meses han devenido en una situación preocupante para los agricultores por la falta de precipitaciones. Apenas ha llegado a llover y de toda España sólo los embalses de la Comunitat Valenciana son los que llegan a superar el 50% de su capacidad gracias a las intensas lluvias de la primavera de 2022, lo que permite afrontar mejor la escasez hídrica.
El territorio valenciano se encuentra en una situación de normalidad, según los datos que maneja la Confederación Hidrográfica del Júcar. «Los agricultores valencianos no vamos a tener problemas para regar, pues los embalses están al 60% de su capacidad», ha indicado el director de AVA ASAJA, Jenaro Aviñó, a 7 Televalencia.
Pese a ello, la sequía se nota y mucho. Para Aviñó, aunque los agricultores no tendrán problemas de suministro hídrico en los próximos meses, el cultivo de secano y la ganadería valenciana están «en situación agónica». De hecho, los problemas de la sequía ya están afectando a los cereales, la viña, olivos o almendros.
Habrá menor producción y, por tanto, menor oferta. La consecuencia directa es, como cabe esperar ante estos casos, el incremento de los precios que también afectará a los cultivos de regadío por los sobrecostes a los que están expuestos.
La misma situación se presenta para los ganaderos. La falta de recursos hídricos afecta a los pastos y han de alimentar a sus animales con pienso, lo que también supone un sobrecoste, al que se suma la necesidad de cubas de agua para que beban.
El director de la asociación agricultora indica que este tipo de situaciones no es nuevo. «En 1995 también hubo un decreto de sequía en el que se utilizaron términos muy similares a los de ahora. Han pasado casi treinta años y seguimos igual», protesta. «Los períodos de sequía son cíclicos, se repiten cada cierto tiempo y debemos prepararnos frente a otra futura sequía«, alerta Aviñó.
REDISTRIBUCIÓN HÍDRICA Y «AUTOPISTAS DEL AGUA»
Para Aviñó la solución pasa por un Pacto de Estado del agua «en el que se creen infraestructuras de almacenamiento y de redistribución hídrica» que eviten el incremento de los costes para productor y consumidor. «Hace tiempo que desde AVA ASAJA hablamos de habilitar autopistas del agua donde esta vaya de donde sobre hacia donde haga falta», indica.
Por otro lado, el director de AVA ASAJA también demanda medidas fiscales que alivien la situación. «Hemos demandado ayudas directas, medidas fiscales y líneas preferentes de financiación. La agricultura y la ganadería valencianos están haciendo frente a costes muy elevados y es necesario el apoyo de la administración«, aclara.
Respecto de la Ley de Cadena Agroalimentaria, Aviñó comenta que «sería la solución para la agricultura y ganadería españolas». Pero «es una ley infrautilizada porque no hay ningún político que quiera ponerla en marcha», se lamenta. Con esta ley funcionando se evitaría «el abandono masivo de explotaciones», explica.
En cuanto a plagas y enfermedades, Aviñó concluye que «debemos prepararnos y no actuar cuando ya lo tengamos todo encima».
