El propietario de una pequeña tienda de cortinas de Barcelona tiene que pagar una multa de 7.000 euros por anunciar que busca dependienta de más de 40 años. La inspección de trabajo entiende que hay una doble discriminación en el anuncio. Trabajo argumenta que supone una discriminación por edad y sexo.
Ha manifestado a medios locales que «no lo hizo con mala fe, sino que quería ayudar al colectivo de mujeres mayores de 40. Un perfil que suele tener dificultades para encontrar un empleo debido a la edad.
Publicó el anuncio en una web de búsqueda de empleo donde matizaba que buscaba a una mujer de «40 años o más» para cubrir una vacante de dependienta. Matiza que lo hizo «sin maldad, pensando en la paridad de la empresa». Indica que de los cinco puestos de trabajo que hay en la tienda, cuatro son hombres y por lo tanto quería al menos una visión femenina en la tienda. El pequeño empresario ha informado que ha contratado a una mujer de más de 40 años, pero esta se ha dado de baja y ha tenido que contratar a otra mujer para el puesto.