Los centros de mayores recibían hace unos meses una notificación del Ayuntamiento de Valencia para cerrar las peluquerías que hay en estos. Desde el sindicato de peluquerías de centros de jubilados han pedido mantener este servicio activo desde hace décadas al considerarlo de primera necesidad para muchos de sus clientes.
Pilar Martínez es peluquera, trabaja desde hace 25 años en el Centro del Calvario. Ahora, se ha visto obligada a cerrar su peluquería por orden del Ayuntamiento. Sin embargo, Pilar no es la única afectada. Todas las peluquerías de los centros públicos han tenido que cerrar.
La clientas están indignadas. Muchas tienen problemas de movilidad. Las peluquerías de los centros de jubilados próximos a sus casas eran un servicio esencial.
Los directores de los centros se encuentran en medio de un cruce legal. Han tenido que despedirse de este servicio pero desconocen los motivos de la orden.
A la espera de una solución por parte del Ayuntamiento, el sector une fuerzas para intentar mantener este servicio tan imprescindible para los pensionistas.
