Unos okupas llaman a la policía y obligan a los propietarios de más de 80 años a marcharse de las inmediaciones de la vivienda. Los okupas son cinco jóvenes de entre 18 y 30 años, argumentaron que tenían miedo de los propietarios.
Lo llamativo es que los dueños de la vivienda son una pareja de 91 y 84 años. Al parecer, estos abandonaron el hogar para pasar el confinamiento con unos familiares. Pero la nieta de la pareja fue avisada por los vecinos que habían detectado movimiento dentro del domicilio. Tras comprobarlo lo denunció a los agentes de la autoridad.
La nieta consiguió que la policía detuvieran a los okupas y fueron acusados de un delito de robo con fuerza. Al parecer, cambiaron la cerradura, destrozaron los muebles y cuadros de la casa.
Los expertos nos dan consejos para saber qué hay que hacer si nos okupan la vivienda. Solo podremos echarlos durante las primeras horas, avisando a la policía en menos de 48 horas. Los agentes pueden echar a los okupas acusándoles de un delito de allanamiento de morada.
Pero los okupas conocen la legislación y hacen todo lo posible para que parezca que llevan más tiempo en la casa. Aconsejan poner una demanda en la comisaría más cercana. El procedimiento durará en función de la saturación de los juzgados.