Las consecuencias del cambio climático podrían tener efectos devastadores en Valencia. La subida del nivel del mar como consecuencia del aumento de las temperaturas se tragaría la Albufera en 2100. Además, el Mediterráneo también engulliría las playas de Pinedo y El Saler, toda una zona que desaparecería.
Así lo predicen los expertos en un visor cartográfico presentado esta semana por la Conselleria de Emergencia Climática. Esta nueva herramienta visual define el comportamiento del litoral valenciano entre el año 2050 y 2100 en función de las emisiones de efecto invernadero.
La herramienta ha arrojado ya algunos resultados preliminares. Estos apuntan a una inestabilidad agravada por los fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más recurrentes y virulentos.
La consellera Mireia Mollà ha advertido que el visor «funciona» y que «ya se están cumpliendo los efectos que pronostica». Es el caso, por ejemplo, de la tendencia erosiva en las playas del centro de la provincia de Valencia. El Saler y Pinedo ya presentan un retroceso de entre 30 y 60 metros en la última década. De seguir dicho retroceso, este podría llegar en el 2100 a la Albufera desapareciendo bajo el mar.
Los resultados del visor señalan también La Marina Alta o el norte de Castellón como otros puntos de presión climática. Además, afirman que en todos los escenarios de predicción la cota de inundación afecta, al menos, al 1% de la población de la Comunitat Valenciana; esto es 50.000 personas.