La Policía Nacional ha detenido en Valencia a un hombre de 42 años acusado de agredir sexualmente a una mujer en la estación de metro de Bailén después de seguirla de madrugada al salir de una discoteca del centro de la ciudad. Los hechos ocurrieron el pasado 10 de noviembre, alrededor de las cinco de la mañana, cuando la víctima, de 35 años, se dirigía sola hacia el transporte público tras pasar la noche en un local de ocio nocturno.
Según ha avanzado el diario Las Provincias, el presunto agresor actuó tras detectar el estado de vulnerabilidad de la mujer, que se encontraba visiblemente afectada por el consumo de alcohol.
De acuerdo con la investigación, el hombre —de nacionalidad argentina y con antecedentes policiales— habría seguido a la víctima desde la discoteca hasta la estación del metro. Una vez dentro y aprovechando que no había más usuarios, comenzó a realizarle tocamientos por encima de la ropa. Ella pidió que dejara de hacerlo, pero él ignoró su negativa, la empujó violentamente al suelo y, mediante el uso de la fuerza, la obligó a practicarle una felación hasta que eyaculó.
Las cámaras de seguridad de la estación registraron la secuencia completa de la agresión. En las imágenes se aprecia cómo el agresor golpea a la mujer, la inmoviliza y después la abandona en el suelo antes de abandonar el lugar apresuradamente. Gracias a estas grabaciones, los agentes pudieron identificar al sospechoso y poner en marcha su localización inmediata.
El detenido rechaza que se le tomen muestras de ADN
La víctima presentó una denuncia formal, en la que narró lo ocurrido y aportó detalles que coincidían con los obtenidos por la Policía. Posteriormente, realizó un reconocimiento fotográfico en el que identificó al presunto violador, lo que permitió proceder a su arresto por un delito de agresión sexual con penetración.
Siempre según la información publicada por Las Provincias, el detenido se acogió a su derecho a no declarar y también rechazó que se le tomaran muestras de ADN para compararlas con los restos biológicos recopilados durante la investigación forense.
El caso ya está en manos de la autoridad judicial, que determinará los próximos pasos mientras continúan las diligencias. La Policía mantiene abierta la investigación a la espera de que la prueba biológica pueda aportar resultados concluyentes.
