Los muralistas valencianos pintan el chalet de Parque del Oeste, imuestra el sol, viento y agua de Valencia. Una iniciativa de la Fundació València Clima i Energia y la Federación de Asociaciones Vecinales de València. El mural artístico de gran formato invita a reflexionar sobre el vínculo ancestral entre los elementos naturales: sol, viento y agua, y su relevancia en la transición hacia un modelo energético sostenible, colectivo y consciente.

El sol aparece como un disco radiante de inspiración egipcia, rodeado de múltiples brazos que irradian energía, remitiendo tanto a Ra, el dios solar de la antigua civilización del Nilo, como a la vitalidad creadora que hoy se asocia a la energía solar. El viento, por su parte, toma la forma de una figura clásica que sopla con fuerza, inspirada en Bóreas, el dios griego del viento del norte, símbolo de potencia y movimiento, en clara alusión a la energía eólica. Finalmente, el agua se representa a través de una gota en movimiento perpetuo, reflejo del dinamismo de las corrientes y de la capacidad transformadora del agua en la mitología universal, desde las ninfas griegas hasta las deidades fluviales de múltiples culturas.

En el centro de la composición, un círculo de personas tomadas de la mano simboliza la comunidad como motor de transformación. Esta imagen encarna uno de los pilares fundamentales de la Oficina de la Energía y de la Federación de Asociaciones Vecinales de València: su función como espacio público de empoderamiento ciudadano, participación activa y divulgación sobre sostenibilidad.

Más allá de su función estética, la intervención busca actuar como dispositivo de mediación cultural. A través de un lenguaje visual accesible y simbólicamente potente, el mural interpela a la ciudadanía, transmitiendo un mensaje claro: la transición ecológica necesita de relatos compartidos, vínculos comunitarios y decisiones conscientes.