Un envase fabricado con residuos de arroz podría ampliar hasta un 25% la fecha de caducidad de los alimentos. La Conselleria de Innovación financia la valorización de residuos generados en la industria del arroz con el fin de transformarlos en compuestos bioactivos y celulosa, dos materiales de útil aplicación para la creación de envases activos y aprovechables en la industria cárnica.
El principal objetivo de esta iniciativa es modificar los componentes propios de los envases de plástico, difíciles de reciclar, por materiales sostenibles que optimicen y amplíen la conservación de los alimentos. De esta manera, se alinea con los principios de la economía circular que impulsa la Comisión Europea.
Se trata de una solución innovadora que combina sostenibilidad, funcionalidad y circularidad. A diferencia de los envases convencionales para productos cárnicos, que suelen estar compuestos por estructuras multicapa con materiales que dificultan su reutilización, ‘Actiurròs’ desarrolla un envase 100% compostable en condiciones domésticas, lo que elimina por completo el uso de materiales no reciclables.
Además, contiene compuestos bioactivos naturales obtenidos a partir de la fermentación de residuos del arroz que prolongan la vida útil de los alimentos y reducen, por tanto, el desperdicio. En este sentido, el proyecto presenta un claro enfoque circular, ya que se aprovecha residuos agrícolas locales como materias primas y reduce la huella ambiental del sistema de envasado alimentario.








