La policía peruana ha detenido a dos individuos como presuntos autores de la desaparición del cuerpo de Nathaly, la joven valenciana pero de origen ecuatoriano que despareció en el país sudamericano el pasado 2 de febrero mientras visitaba la localidad de Cuzco.
Los dos presuntos asesinos son el dueño y un trabajador de un servicio de transporte rústico elevado, similar a un teleférico, que ofrecía a los turistas una visión panorámica del Valle Sagrado de los Incas.
Según apuntan las informaciones, la joven de 28 años que estaba pasando su vacaciones en Perú, llegó a la zona arqueológica de Moray para visitar el Valle Sagrado de los Incas junto al río Vilcanota-Urubamba. Nathaly se montó al teleférico y sufrió un accidente que le causó la muerte inmediatamente, por lo que los dos hombres decidieron ocultar el cadáver y después lanzarlo al río, justo en la zona de Paucarbamba.
Según la información policial, el 2 de enero la joven llegó al sitio arqueológico de Moray y de ahí se dirigió a Maras, para luego seguir a pie hasta la comunidad campesina de Cacllaracay, donde se ofrecía el servicio de observación a los turistas.
Tras conocer este testimonio, los agentes de la Divincri y que iban acompañados por dos miembros de la Guardia Civil española llegados especialmente al Cuzco para investigar el caso, continúan con la búsqueda del cuerpo con autorización del Ministerio Público.
Los padres de Nathaly llegaron a Perú el pasado martes, con la intención de sumarse a la búsqueda que se está realizando en el Cuzco y, según indicó su madre, Alejandra Ayala, el 31 de diciembre pasado fue la última vez que tuvo comunicación con ella, quien le aseguró que estaba «bien y feliz».
Además, precisó que Nathaly, de 25 años y con estudios de Educación Física, tenía planeado seguir conociendo otras ciudades del país después de visitar el Cuzco. EFE