La futura ley del Taxi de la Comunitat Valencia está en plena marcha. El pleno del Consell ya ha aprobado el proyecto que se remitirá a Les Corts para su tramitación.
Esta ley nace con unos objetivos muy claros: profesionalizar el sector y garantizar la eficacia y calidad del servicio de taxis, ¿pero cómo lograr esto? El Consell ha propuesto para ello “una persona, una licencia”, es decir, sólo el titular de la autorización del taxi sería el que podría ejercer esta labor. Pero aún hay más, la ley propone la creación de un Centro de Distribución de los Servicios del Taxi donde se ofrecerá a los taxistas la posibilidad de agruparse en sociedades o cooperativas con el fin de concentrar la oferta y mejorar la comercialización.
Sin embargo, la ley del Taxi no ha sido bien recibida por todos los trabajadores quienes denuncian la falta de comunicación entre el Consell y los propios taxistas para crear una normativa en la que aseguran que no existe ningún estudio previo del servicio.
Es aquí donde entra en juego la Plataforma de Afectados que preside Isabel Segura. Una agrupación donde aseguran que este proyecto de ley hundirá al sector y afectará a más de 400 familias valencianas.
El objetivo de esta Plataforma es reunirse con la Conselleria de Vivienda para poder tratar algunos de los puntos más polémicos de la normativa y así llegar a un consenso que beneficie a todos los taxistas de la Comunitat.