Valencia volverá a ser escenario de protesta el próximo lunes 28 de abril, coincidiendo con el festivo de Sant Vicent Ferrer. Más de 200 entidades cívicas, sociales y sindicales han convocado la séptima manifestación contra el president de la Generalitat, Carlos Mazón. El objetivo es exigir su dimisión por la gestión de la DANA del pasado 29 de octubr, que dejó más de 200 víctimas mortales, miles de damnificados y cuantiosos daños materiales.
La protesta, bajo el ya conocido lema ‘Mazón dimissió’, arrancará a las 18:00 horas desde la Plaza del Ayuntamiento y repetirá el recorrido de las anteriores convocatorias: calle de las Barcas, Poeta Querol, calle de la Paz, plaza de la Reina, Brodadors, calle del Micalet y final en la Plaza de la Virgen.
La coincidencia de esta movilización con la procesión de Sant Vicent Ferrer ha generado gran expectación. Ambos eventos comparten parte del itinerario y franja horaria, ya que la procesión saldrá una hora más tarde desde la Puerta de los Hierros de la Catedral, lo que podría provocar complicaciones logísticas en el centro histórico de València.
SÉPTIMA MARCHA CONTRA MAZÓN
Esta será la séptima marcha ciudadana desde la catástrofe de octubre. Las anteriores se celebraron los días 9 y 30 de noviembre, 29 de diciembre, 1 de febrero, 1 de marzo y 29 de marzo, congregando a miles de personas.
En la última manifestación, según la Delegación del Gobierno, participaron unas 25.000 personas, mientras que la del 1 de marzo superó los 30.000 asistentes según las mismas fuentes.
Las organizaciones convocantes denuncian la falta de respuestas claras por parte del Consell y critican lo que consideran una gestión ineficaz y carente de empatía hacia las víctimas. También reclaman mayor inversión en infraestructuras de prevención y atención a emergencias, así como un plan de recuperación efectivo para las zonas afectadas.
A punto de cumplirse seis meses de la devastadora DANA que impactó en Valencia, la presión social continúa aumentando. La coincidencia con una festividad tan emblemática como la de Sant Vicent Ferrer añade un componente simbólico a una movilización que busca mantener viva la memoria de las víctimas y exigir responsabilidades políticas.
