El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha vuelto a calmar las aguas de la política valenciana. El quid de la cuestión ha residido esta vez en un supuesto adelanto electoral. El origen de la polémica: El Diario Oficial de la Generalitat (DOGV).
El portal valenciano publicó una resolución en la que la Conselleria de Hacienda delegaba en la de Justicia las competencias técnicas derivadas del proceso electoral a Les Corts. El documento pilló de imprevisto a la política valenciana al faltar casi dos años para los próximos comicios.
«Con el fin de agilizar y optimizar los procesos de contratación derivados de la futura celebración de las elecciones autonómicas, la Conselleria de Justicia pretende iniciar la contratación del servicio de captura, tratamiento y difusión de los datos de las elecciones a Les Corts«. Estas palabras recogidas en el DOGV han causado revuelo en los grupos políticos valencianos.
Motivos no faltan, pues la última vez que se produjo esta delegación de competencias fue en octubre de 2018. Es decir, seis meses antes del primer adelanto electoral en la historia de la Comunitat.
Puig: «Si pudiera convocar algo, sería adelantar las vacaciones»
A pesar de ello, la anticipación de las elecciones se ha quedado en un rumor. Así lo ha ratificado Puig durante la rueda de prensa para informar de los asuntos acordados en la reunión de la Mesa Interdepartamental. Durante la intervención ha respondido claramente a la pregunta del millón a la par que se mostraba simpático. «Si pudiera convocar algo, sería adelantar las vacaciones no las elecciones», ha manifestado.
Así ha rechazado el socialista la idea de un adelanto electoral. En este sentido, Puig ha recalcado que esta opción no es «razonable» si se tiene en cuenta el proceso de recuperación en el que se encuentra la Comunitat Valenciana.
