
La Policía Nacional ha detenido en Valencia al anestesista que participó en los procedimientos dentales a dos niñas de seis y cuatro años en una clínica privada de Alzira. Una de ellas falleció horas después y la otra permaneció hospitalizada durante varios días. La detención se ha producido durante la mañana de este miércoles, tras varias semanas de diligencias policiales y de inspección sanitaria.
Fuentes de la investigación confirman que al facultativo, de 43 años, se le atribuyen presuntos delitos de homicidio imprudente, lesiones, omisión del deber de socorro y un delito contra la salud pública. Su arresto se habría llevado a cabo después de que los agentes realizaran registros en su domicilio y en la propia clínica dental. El local lleva clausurado desde hace semanas por orden de la Conselleria de Sanidad.
Asimismo pocas horas después, a las doce de la mañana, se ha detenido en Alzira a la propietaria de la clínica, una mujer de 50 años, como presunta autora de los delitos de omisión del deber de socorro y contra la salud pública
La niña de seis años falleció el pasado 20 de noviembre tras llegar en parada cardiorrespiratoria al Hospital de la Ribera. El fatídico suceso se produjo poco después de recibir una sedación para un tratamiento dental. Esa misma tarde, otra menor de cuatro años, atendida en el mismo centro, presentó fiebre, somnolencia y vómitos. La niña tuvo que ser trasladada en una unidad SAMU al Hospital Clínico de València. Allí ingresó en la UCI Pediátrica.
Sanidad confirmó días después que la clínica carecía de autorización para aplicar sedación intravenosa. Es decir, el mismo tratamiento realizado a ambas niñas. A raíz de los hechos, el centro fue suspendido de actividad. También la administración inició un expediente informativo para esclarecer el cumplimiento de los protocolos y la trazabilidad de los fármacos utilizados.
Los evolución de la investigación hasta ahora
En paralelo, un juzgado de Alzira instruye diligencias previas para reconstruir con precisión la secuencia de acontecimientos y determinar responsabilidades penales. El caso ha despertado un fuerte impacto social en la comarca y mantiene a la familia de la niña fallecida a la espera de resultados concluyentes.
Desde el día de los hechos, el 20 de noviembre, la situación ha evolucionado en varias fases clave. Primero, la menor de cuatro años ingresó en estado grave en el Hospital Clínico de València, donde permaneció más de una semana bajo vigilancia médica. Su evolución fue positiva y finalmente recibió el alta este martes, tras mostrar una recuperación estable desde su paso a planta el 24 de noviembre.
Paralelamente, la Conselleria de Sanidad abrió un expediente informativo y decretó la suspensión cautelar de la actividad de la clínica dental de Alzira, que fue registrada por la Policía Nacional y los servicios de Inspección Sanitaria en busca de documentación y muestras de los fármacos administrados.
El procedimiento policial culmina este miércoles con la detención del anestesista, considerado pieza clave para esclarecer qué ocurrió durante las sedaciones aplicadas y si se ajustaron, o no, a los protocolos clínicos permitidos.












