Este año, la mejor escena de ciencia representada en los ninots infantiles tendrá un premio de 800 euros. La Universitat Politècnica de València (UPV) ya está preparando una nueva edición del certamen “La Ciència a les Falles”. Se trata de una iniciativa que lleva unos años trabajando para que la ciencia, la investigación y todo lo que se hace en los laboratorios llegue al público a través de las Fallas.
En esta ocasión, la convocatoria estará dirigida únicamente a las fallas infantiles. Es una forma de despertar la curiosidad de los niños y niñas que participan en la fiesta desde sus comienzos.
La propuesta es sencilla, pero muy abierta para que cada comisión pueda jugar con su creatividad. Las escenas presentadas podrán mostrar laboratorios de I+D, investigaciones que se desarrollan a diario o cualquier avance científico que llame la atención.
También son válidas otras ideas más libres, siempre que ayuden a visibilizar el trabajo de quienes se dedican a la ciencia. Lo importante es que el ninot cuente algo que acerque ese mundo al público infantil, que a veces es el que más preguntas se hace.
En esta tercera edición se entregarán tres premios económicos. El primero estará dotado con 800 euros, el segundo con 500 y el tercero con 300. Además del dinero, las tres comisiones ganadoras recibirán un estandarte conmemorativo para exhibirlo en su casal.
Los ninots en el Museu de Ciència i Falles de la UPV
Y como extra, los ninots premiados pasarán a formar parte del Museu de Ciència i Falles de la UPV. Un espacio en el que se guarda lo mejor de este proyecto y que cada año va ampliando su colección.
“La Ciència a les Falles” forma parte del programa anual de divulgación científica de la UPV. Todo el proyecto está impulsado por su Área de Comunicación, a través de la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación, y cuenta con la colaboración de la comisión fallera de la propia universidad.
A esto se suma el apoyo de Junta Central Fallera y de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Un respaldo que demuestra que esta iniciativa no es algo puntual, sino un esfuerzo conjunto para que ciencia y tradición sigan caminando de la mano.
Con este certamen, la UPV vuelve a apostar por las Fallas infantiles como un espacio donde aprender, jugar y descubrir. Y qué mejor manera que hacerlo a través de las escenas que más ilusión les generan a los pequeños.














