La Policía Local pone 92 denuncias relacionadas con la venta o el uso de material pirotécnico durante todo el mes de marzo. Cincuenta de estas se han puesto a locales dedicados al almacenamiento y venta de material pirotécnico. Estos establecimientos concentran la mayor parte de su actividad durante las Fallas y las semanas anteriores.
Las diferentes Comisarías de Proximidad realizan una exhaustiva inspección de estos comercios. Comprueban que cuenten con la autorización de la Delegación de Gobierno y la licencia municipal necesaria para ejercer la actividad. Además, el personal que trabaja tiene que estar habilitado y registrado en un listado. También se comprueba el envasado y etiquetado de los productos para garantizar la seguridad y trazabilidad. Y a continuación se revisa el aforo y la cantidad de pólvora que puede contener el local.
La Policía también comprueba otros aspectos del local como las puertas de entrada y salida de personas. Incluso el almacén de seguridad, que debe tener un mecanismo de apertura y cierre acorde con la normativa. Asimismo, la cartelería debe informar de aspectos importantes como el aforo o las medidas de seguridad. Las denuncias a estos establecimientos pueden suponer un importe mínimo de 600 euros.
Las otras 42 denuncias se han puesto por el uso incorrecto del material pirotécnico, por utilizarlo fuera de las zonas de fuego, fuera del horario establecido o sin ajustarse a la edad de la categoría del producto. En 12 de las 92 denuncias, además, se ha procedido a decomisar el material pirotécnico.
Por otra parte, la Policía Local también ha puesto 109 denuncias a los puestos de venta de masas fritas o churrerías, por no cumplir con las normas de seguridad o por temas administrativos, como no tener la licencia o carecer de hojas de reclamaciones.