La sala Parpalló del MuVIM abre sus puertas al ‘Urbanismo poético’ de Miquel Navarro. Hasta el próximo 10 de diciembre, el museo de la Diputació expondrá las ciudades imaginarias del artista valenciano, premio nacional de Artes Plásticas. Además, también habrá cinco esculturas de hierro, acero y aluminio entre las que se encuentra el prototipo de la Pantera Rosa.
La corporación provincial estrecha así su vínculo con el creador de Mislata, que hace justo un año exponía en el Palau dels Scala, sus ciudades de terracota y otras piezas clásicas y actuales. El “laboratorio de Miquel Navarro”, como él mismo definió aquella colección, se estrena ahora en el MuVIM con una nueva propuesta de la que emana su obsesión por las estructuras urbanas y el agua.
Para Paco Teruel, diputado de Cultura, Miquel Navarro «no necesita presentación, ya que sus obras forman parte del urbanismo que nos rodea”. El responsable provincial ha recordado que es “la primera vez que uno de nuestros artistas más universales expone en el MuVIM, con una muestra exclusiva”.
Por su parte, el artista ha manifestado que esas urbes son “el pretexto para reunir mis fobias y encantos, lo bueno y lo malo que habita en mi interior”. Pueden ser concebidas “como un cuerpo humano con su corazón y sus extremidades, pero también como construcciones metafísicas en las que no existe el hombre, que es el espectador”.
Navarro admite influencias del constructivismo ruso, la arqueología, las ruinas como elemento romántico, y los ecos de la industria y el medio rural en los que se crio, pero también de “los belenes que tanto me gustaban de pequeño y los cromos de la colección de Nestlé sobre las maravillas del universo”.
Del vestíbulo a la sala Parpalló
La obra de Miquel Navarro tomará el museo de la Diputación desde el vestíbulo hasta la sala Parpalló, que acogerá otra de las ciudades imaginarias del artista. Cinco esculturas, entre ellas el prototipo de la Pantera Rosa, la popular fuente instalada en 1984 en la entrada sur de Valencia para conmemorar la llegada de las aguas del Júcar, completan una muestra que también contará con una acuarela, como estandarte de la producción pictórica del artista.
En cuanto a las ciudades miquelíticas, tan características del creador del barrio de la Morería, el jefe de exposiciones del MuVIM, Amador Griñó, ha considerado que son “urbes metafóricas, repletas de simbología, producto de la historia y el territorio en el que el ser humano reúne sus conocimientos y obsesiones, sus deseos y frustraciones, sus éxitos y fracasos”.
Todos estos elementos podemos hallarlos en las obras de Miquel Navarro, especialmente en las ciudades de terracota, pero también en cada una de las esculturas que acaban ocupando un lugar destacado en urbes reales como Barcelona, Murcia, Vitoria, Zaragoza, Bruselas, Las Palmas y, por supuesto, València. “En ellas permanece lo inhóspito de la intemperie, la soledad de las grandes vías y el vacío de lo perdido”, concluye la comisaria de esta exposición centrada en el urbanismo poético del creador de la Pantera Rosa, el Parotet y la Mantis, entre otras célebres esculturas.