El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, vive en las últimas semanas, de nuevo, la presión de los focos. Lo hace desde que ha presentado su libro titulado “Matar a Rubiales”. En él defiende su forma de gestionar la federación y, además, denuncia la campaña de acoso mediático a la que fue sometido.

Tras años de juicios mediáticos y acusaciones, Rubiales toma la palabra. Uno de los capítulos más intensos, sin duda, pasa por el beso a Jenni Hermoso que provocó su salida de la Federación.

El exdirigente volvió a referirse al beso a la futbolista Jennifer Hermoso como un accidente «un gesto consentido fruto de la euforia». El incidente, que tuvo lugar durante la celebración por la victoria del mundial femenino,  fue el detonante de su caída, y ocupó portadas durante meses.

“ Mi error fue comportarme como un jugador, no como un presidente.”

Asegura que se arrepiente del gesto, no por su significado, sino por el contexto institucional en el que se produjo. Reivindica, además, una relación cercana con las jugadoras y recuerda episodios personales con ellas. Unas vivencias que “fueron ignoradas por quienes pretendían construir su imagen de depredador”.

Otro de los elementos que alimentó su polémica ocurrió ese mismo 20 de agosto de 2023. Este fue el gesto llevándose la mano a los genitales que el exdirigente realizó en el palco. Rubiales asume el error, pero rechaza cualquier interpretación ofensiva:

“Era un ‘ole tus huevos’ hacia Jorge Vilda. Su familia había sido machacada mediáticamente.”

Frente a las especulaciones sobre consumo de sustancias, se mostró tajante defendiendo su sobriedad. El exdirigente negó categóricamente cualquier posible acusación al respecto. “No bebo alcohol, no fumo, no tomo drogas. Los que me conocen lo saben», ha asegurado el canario.

Un libro con polémica desde la presentación

Desde la misma presentación del libro, la polémica acompaño al exfutbolista. En ella, un familiar agredió con un huevo al expresidente, una actitud que sirvió a muchos para denunciar una polémica inventada. Rubiales asegura «no tengo relación con ese familiar desde hace años, cuando me envió un mensaje amenazándome»

Rubiales sostiene que el libro tiene como objetivo desmontar lo que considera un relato fabricado desde intereses políticos, mediáticos y económicos.

“Muy poca gente enseña los papeles. Yo sí»

«Todo lo que se ha hecho durante mi mandato se ha hecho con honestidad”, insistió, aludiendo a un ecosistema que, según él, ha vivido “de atacarle” y que opera bajo dinámicas de cancelación vinculadas “a la ultraizquierda y al universo woke”.

La Supercopa de España, Arabia Saudí y el conflicto con Tebas

Rubiales habla, durante la entrevista de su relación con Tebas y la decisión de llevarsela Supercopa de España. El expresidente señaló como verdadero origen de su persecución mediática esta “transformación” de la Supercopa de España. Y defiende su traslado respaldándose en el aumento de ingresos que supuso.

“Pasamos de 120.000 euros a más de 40 millones al año. Ese dinero iba al fútbol modesto, al femenino y a la base. Lo que querían era que yo renunciara a eso», ha declarado el exdirigente.

“Cuando no tragas, empieza la máquina de triturar: noticias falsas, denuncias y titulares”

Rubiales recuerda que la operación fue informada y votada en Asamblea. Asegura que clubes como el Valencia, críticos con su gestión, habían participado años antes en giras similares y cobrando cantidades muy inferiores.

Negó rotundamente irregularidades y defendió la limpieza de la operación. Para este punto apela a Javier Puyol, letrado del Constitucional. Él fue quién validó la operación descartando que hubiera conflicto de intereses.

 

Rubiales presentó su libro en el programa «El Balconcito» de Toni Castellano, donde también habló de sus polémicas en los últimos dos años y medio

“Madrid o Barcelona cobraban más, pero es que es el mercado. Cuando van a un amistoso piden cinco o seis millones. Nosotros hicimos criterios similares a los de la Champions: historial, masa social, audiencia. Y se generó una vía de ingresos que no existía», ha declarado Rubiales respecto a las críticas por el reparto de ingresos.

Según el exmandatario, aquí surgió el choque frontal con Javier Tebas. Rubiales defiende que los 400 millones que la federación generaba durante su mandato se destinaban íntegramente al fútbol. Por contra, el exjugador granota crítica el enfoque de Tebas más centrado en invertir ingresos en publicidad.

“No es una pelea personal, es un modelo” ha dicho sobre sus diferencias. Unas discrepancias que tuvieron consecuencias y, en última instancia, precipitaron su caída en desgracia.

Reformas y legado deportivo

Rubiales defendió su etapa al frente de la Asociación de Futbolistas Españoles. Enumeró logros como la inclusión de mujeres en el sindicato, un fondo de pensiones para la retirada de jugadores, el incremento de becas o la erradicación de deudas que asfixiaban históricamente a clubes. Asegura que su compromiso siempre estuvo con el jugador.

“Pasamos de dos a quince millones para protegerlos. Muchos cobraron gracias a eso. Pero no interesa contarlo»

El expresidente recordó su trayectoria deportiva, en clubes como Levante, Alicante o Hamilton escocés, como una prueba de que no es un burócrata, sino alguien que conoce la industria desde el césped: “He vivido lo que viven ellos. Por eso peleé con la intensidad con la que peleé.”

Rubiales asegura que seguirá defendiendo su versión “hasta las últimas consecuencias” y que gran parte de lo que aún no se ha contado está en «Matar a Rubiales». Insiste en que su historia no ha terminado.