Lolita Flores pasó ayer por el programa Ágora para hablar de la obra de teatro que está representando en el Talia de Valencia, ‘Prefiero que seamos amigos’ junto al actor Luis Mottola. Una comedia romántica y que, según confesó el artista, tenía muchas ganas de hacer porque el anterior personaje que había interpretado y que fue el de Natalia ‘la Colometa’ en la Plaza del Diamante le había hecho sufrir mucho.
Lolita, que ganó un Goya como mejor actriz revelación por la película Rencor, afirmó en su momento sentirse una intrusa en el campo de la interpretación, aunque después de muchas series y obras de teatro ya casi no tenía esa sensación.
Ante el movimiento que existe actualmente entre las actrices por la falta de oportunidades laborales o por las situaciones de abuso que han tenido que sufrir algunas, la intérprete de Sarandonga se mostró muy clara señalando, incluso, que culpables de esta situación eran los hombres y que las mujeres tenían muchas ganas de seguir trabajando pero sin que les pusiesen una mano encima.
Lolita no pudo evitar hablar de su madre, la recordada Lola Flores, una de las mejores artistas que ha dado este país y defendió que el legado cultural de la Faraona era incalculable, no solamente para España si no para toda su familia.
Lolita Flores, quién confesó que no tiene ganas de volver a la música de momento, aseguró que no tendría ningún inconveniente en trabajar con sus hijos, pero prefiere que, tanto Elena cómo Guillermo Furiase, se asienten en sus profesiones.
