Las últimas lluvias garantizan un verano sin restricciones de agua. Las precipitaciones registradas durante las dos últimas semanas han dado un respiro a la situación de sequía a las cuencas del Júcar y el Segura.
Según la Confederación Hidrográfica del Júcar, las lluvias permiten asumir con «plenas garantías» la campaña veraniega. Globalmente, este año hidrológico estaba siendo lo quinto peor de la serie histórica de los últimos 32 años en cuanto a precipitación acumulada, con cerca de 174 l/m² de media a principio del mes de mayo. Con todo, la lluvia de las últimas semanas permiten mejorar esta situación hasta conseguir una cifra próxima a los 280 l/m², aunque los datos siguen por debajo de la media.
Las precipitaciones registradas se han traducido en un ahorro para los regantes y en una importante recarga para los acuíferos de la demarcación. Al mismo tiempo, la lluvia ha permitido incrementar el volumen de agua en algunos de los embalses gestionados por la confederación en unas cifras que se sitúan alrededor de 15 hm³.
En este sentido, la Confederación Hidrográfica del Segura recalca que el último episodio de lluvia permite garantizar “con mayor seguridad” el abastecimiento de agua a los usuarios durante todo el verano “sin restricciones en la mayor parte del territorio”.
En cuanto a la cuenca del Segura, esta ha dejado de estar en situación de sequía prolongada. Por el momento, se mantiene el nivel de prealerta según los indicadores de sequía la Confederación Hidrográfica del Segura. Así, la CHS también garantiza el agua para los regantes, el consumo humano y los usos industriales hasta final del verano sin tener que aplicar restricciones.